Un programa de cría desarrollado en Holanda ha permitido recrear ganado que no se veía desde hacía siglos en la República Checa. El programa recreó bovinos enormes íntimamente relacionados con los uros (Bos primigenius), otrora los mamíferos terrestres europeos más pesados —antepasados silvestres del ganado actual— y extinguidos en el siglo XVII.
Se cree que aquellos desaparecieron del territorio actual de la República Checa en los siglos XII o XIII.
El martes se introdujo un rebaño reducido en un refugio checo como parte de un proyecto de usar esos animales voluminosos para mantener el carácter estepario de la antigua base militar de Milovice, a 35 kilómetros al nordeste de Praga.
Las bestias se sumaron a un rebaño de 15 caballos salvajes del Parque Nacional Exmoor de Gran Bretaña que fueron traídos aquí en enero para contener la propagación de hierba y arbustos agresivos. Esas plantas invasivas empezaron a crecer después que las fuerzas soviéticas se retiraron de la base en 1991, amenazando las plantas y animales originales de la zona.
Después de un traslado de nueve horas, cinco vacas y un toro fueron descendidos de un camión en la madrugada a su nuevo hábitat.
"Se complementan entre sí", señaló Dalibor Dostal, director de European Wildlife, la organización responsable del proyecto. No anticipa conflictos entre los caballos y el ganado en el área de 40 hectáreas.
"Mientras los caballos salvajes prefieren la hierba, a los uros les gustan los arbustos. No compiten entre sí. Su combinación forma una sociedad natural tal como fue en la naturaleza silvestre durante miles de años".
La fundación holandesa Taurus unió fuerzas con la Universidad de Wageningen y otros grupos en 2008 en el programa Tauros, como se denomina el programa de los nuevos animales.
Conociendo el ADN de los uros, los científicos analizaron algunas variedades de ganado primitivo similares a la de sus antepasados extinguidos, entre ellos Pajuna, Sayaguesa y Limia de España, Maremmana de Italia y Highlander de Escocia.
Mediante cruzas los expertos han venido trabajando para recrear los uros originales, dijo Rewilding Europe, otra organización participante.
"En unas pocas generaciones deberíamos ser capaces de obtener un animal que luzca como el uro y ejerza el mismo impacto sobre el ambiente", dijo Dostal.
La República Checa es el primer país de Europa central u oriental en recibir los animales de Holanda. Le seguirá Rumania. Ya hay rebaños en Portugal, España y Croacia.
kal