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Tecnoradio tuvo la obligación de informar al regulador sobre los nombres de los accionistas, su participación en la empresa y su relación con alguna compañía de televisión o radio.
Este era un requisito que se contempló en el formulario de Competencia de la licitación de frecuencias de radio realizada por el IFT.
“Identifique únicamente a las personas físicas que participen, directa o indirectamente, en el capital social, en los órganos encargados de tomar las decisiones (que incluyen pero no se limitan a la administración, a definición de las políticas y los objetivos o la gestión, conducción y ejecución de sus actividades) y como directivos, gerentes, administradores o sus equivalentes de sociedades, asociaciones o empresas que cuenten con algún título de concesión que le permita ofrecer servicios de TV abierta o radiodifusión sonora dentro del territorio nacional”, solicita el texto.
EL UNIVERSAL informó que Carlos Lara Sumano, director del Instituto Mexicano de la Radio (IMER), contaba con 249 acciones de 600 que integran Tecnoradio, quien ganó 37 frecuencias.
Sin embargo, el directivo dijo en entrevista radiofónica que desde 2016 no tiene acciones de la empresa y desconoce a los dueños.
La información sobre competencia económica debió ser enviada a través del Sistema Electrónico de Registro y Presentación de Ofertas (SERPO), entre el 29 de agosto y el 9 de septiembre de 2016.
La información pedida debía “evaluar efectos de la participación de los interesados y personas relacionadas en las localidades involucradas en la Licitación No. IFT-4 en los servicios de radio abierta comercial”, dice el formulario.
El regulador asegura que la información pretendía cumplir con las medidas protectoras y promotoras e competencia económica.
