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sara.cantera@eluniversal.com.mx
La marca sueca Volvo busca un 8% de participación de mercado en el segmento de autos de lujo en México.
Actualmente, la compañía tiene una cuota de 2.3% dentro del segmento de autos de lujo, de acuerdo con JATO Dynamics.
Para incrementar sus ventas, Volvo reforzará el servicio de mantenimiento para sus vehículos con una mayor disponibilidad de refacciones, haciendo más transparente el proceso de reparación de un vehículo.
Además, la compañía quiere incrementar el valor de reventa de las unidades. “Primero, vamos a tener nuevos productos lo más rápido posible; segundo, vamos a mejorar el servicio para los clientes, y necesitamos crear una mejor percepción de la marca para que el valor residual de los vehículos sea más alto”, dijo Torben Eckardt, nuevo director general de Volvo en México.
La empresa explicó que de las 100 refacciones que más se dañan en un accidente, tienen disponibles 93% de las partes para acelerar el proceso de reparación, y si hay alguna refacción que no está disponible en México, la importarán por avión para no retrasar los tiempos de compostura.
Eckardt comentó que también implementarán el sistema “Volvo Personal Service” en sus agencias, para el cual técnicos especializados recibirán al cliente cuando su auto tenga una falla y que el dueño hable directamente con el encargado de la reparación de su vehículo sin intermediarios en la recepción de la agencia.
México es el segundo país con el mayor volumen de ventas en Latinoamérica para la compañía, después de Brasil, por lo que considera que existe un mayor potencial de comercialización en el mercado.
De enero a julio, comercializó 850 vehículos en el país, 12.7% más respecto al mismo periodo de 2015.
“México es muy importante para la compañía, tenemos buena competencia en Brasil y Chile, pero México es el mercado número dos en Latinoamérica y yo quiero que sea el número uno”, apuntó Eckardt.
Sobre la posibilidad de fabricar vehículos en México después de que la compañía optara por instalar una planta en Carolina del Sur, Estados Unidos, el directivo aseguró que la posibilidad no está descartada.
“Queremos producir en México y lo estamos buscando, pero tenemos que buscar otras opciones también porque hay que comparar. Me encantaría tener una fábrica en México, nada está congelado, éste es el inicio de nuestra revolución”, agregó.
