Los estados de Nueva York y Massachusetts demandaron a Volkswagen y sus afiliadas Audi y Porsche por el caso de manipulación de emisiones, diciendo que los fabricantes alemanes de autos defraudaron a los usuarios al vender vehículos con motores diésel equipados con software que les permitía burlar las pruebas de emisiones contaminantes.
Las demandas, anunciadas el martes, sostienen que Volkswagen y sus afiliadas vendieron más de 40.000 vehículos en los dos estados con los dispositivos instalados. Además, acusan a empleados de la compañía de tratar de encubrir la manipulación presentando documentos falsos a los dos estados y destruyendo evidencia incriminadora.
"Las acusaciones contra Volkswagen, Audi y Porsche revelan una cultura arraigada de arrogancia corporativa, combinada con una indiferencia consciente hacia la ley y la protección de la salud pública y el ambiente", dijo el secretario de Justicia de Nueva York, Eric Schneiderman.
"Estas demandas deberán servir como un alerta en todas las salas corporativas de que si una compañía comete ese tipo de ilegalidad calculada y sistemática, impondremos toda la fuerza de la ley —y las sanciones más severas posibles— para proteger a nuestros ciudadanos", agregó.
Altos ejecutivos de VW, incluso el entonces director ejecutivo Martin Winterkorn, sabían del engaño y participaron en gestiones para encubrirlo, dice la demanda de Nueva York.
En una declaración, Volkswagen dijo que negocia con las autoridades "una amplia solución nacional para todos los asuntos ambientales restantes derivados del asunto del diésel". La compañía resaltó además que ha acordado comprar o modificar los vehículos afectados, crear un fondo ambiental de 2.700 millones de dólares e invertir 2.000 millones en infraestructura para vehículos con cero emisiones".
"Las acusaciones en demandas presentadas por ciertos estados hoy no son nuevas y nosotros hemos estado respondiendo en nuestras discusiones con las autoridades federales y estatales en Estados Unidos", respondió la compañía. "Es lamentable que algunos estados hayan decidido demandar ahora, pese a su previo respaldo al proceso colaborativo en curso".