Gracias a las fuertes ventas de su nuevo teléfono inteligente Galaxy S7, la compañía surcoreana Samsung elevó hoy en poco más de 10 por ciento sus expectativas de beneficios operativos durante el primer trimestre del año.
El mayor productor de teléfonos móviles del mundo anunció este jueves en un comunicado que espera alcanzar beneficios por 5.6 mil millones de dólares (mdd) en el periodo que va de enero a marzo pasados, por arriba de su previsión anterior.
El monto representa un incremento de 10.37 por ciento respecto al mismo periodo del año pasado, y un aumento de 7.49 por ciento comparado al trimestre inmediato anterior.
La mejora de las perspectivas llegó después de que Samsung dio a conocer fuertes ventas de su modelo insignia de smartphone, que estima dieron un salto de 4.0 por ciento a 42 mil mdd en el primer trimestre del año, por arriba de los 40 mil 600 mdd del mismo lapso de 2015.
Los ingresos estimados por ventas del Galaxy S7, que salió a la venta a principios de marzo pasado, fueron similares a lo previsto por analistas, quienes aseguran que la empresa ha disfrutado del buen comportamiento del nuevo smartphone en el mercado.
El predecesor de ese dispositivo, el Galaxy S6, salió a la venta en abril del año pasado pero tuvo un impacto limitado en el rendimiento de la compañía en el primer trimestre de 2015.
Se estima que las ventas del Galaxy S7, que es resistente al agua y el polvo, superaron los 10 millones de unidades por encima de las expectativas, de acuerdo con despachos de la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
La compañía reportará sus resultados completos del primer trimestre de 2016 a finales de este mes y si confirman sus expectativas será un determinante cambio de tendencia, ya que sus ingresos cayeron el año pasado.
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