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De 2012 a la fecha, los préstamos personales a través de las redes de personas suman 50 millones de pesos, con una cartera vencida de 3.8%, de acuerdo con Gerardo Obregón, director general de la empresa Prestadero.
El directivo dijo que este tipo de préstamos tiene tasas de interés en algunos casos más reducidas en comparación con los productos de la banca tradicional, ya que este financiamiento, conocido como “persona a persona”, ofrece créditos desde 8.9 hasta 28.9% de interés a tasa anual.
“Somos como un Uber de crédito. No prestamos con nuestro balance, sino que ponemos en contacto a personas para que se presten entre ellos, cuidando que tengan un buen historial de crédito. No aceptamos cualquier solicitud que nos llega. De hecho, aprobamos menos de 10% de las peticiones que recibimos”, dijo.
Este tipo de financiamiento se basa en la reputación que tengan los solicitantes en el pago de sus créditos y en otros casos también de su historial en redes sociales. El préstamo se genera a partir de usuarios que estén dispuestos a otorgar créditos y conforme al riesgo se determina la tasa de interés.
Prestadero tiene registrados 55 mil usuarios y hasta el mes de junio pasado se generaron 6 millones 253 mil pesos en intereses.
Hasta el momento, este tipo de empresas no están reguladas en México. “En parte nos pasa lo mismo que Uber en cuanto a la regulación.
ero no tenemos los mismos problemas que ellos porque todavía ningún banco nos ha visto como competencia. No hay una regulación hasta el momento. Ya estamos en pláticas con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y esperamos que en breve se presente la regulación”, aseguró.
Los créditos personales en México mantienen un crecimiento elevado en lo que va del año. Cifras a mayo de la CNBV detallan que este financiamiento subió 20% en términos anuales.
