Nueve de las 32 entidades federativas concentraron seis de cada 10 dólares que ingresaron a México por concepto de remesas, siendo las más socorridas por la transferencia de recursos.
De acuerdo con información del Banco de México (Banxico), el país captó 26 mil 970 millones de dólares por remesas en 2016, el mayor flujo en la historia.
Los hogares michoacanos obtuvieron más recursos, seguidos de los jaliscienses, guanajuatenses, mexiquenses y poblanos.
En sexto lugar se ubicaron las familias oaxaqueñas, continuando con las capitalinas, guerrerenses y veracruzanos.
Las nueves entidades se repartieron 60% del total de remesas que ingresaron el año pasado, mientras que los 23 estados restantes se repartieron 40%.
Para el Banco Mundial, las remesas constituyen una fuente importante de ingreso para los hogares receptores, lo que conlleva el incremento de su capacidad de consumo y ahorro, reflejándose así en una mejora en su nivel de vida.
La institución considera que las remesas tienen un alto potencial para incidir en la disminución de la pobreza y en la desigualdad del ingreso.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) del Inegi, el número de hogares que recibían remesas ascendió a 1.29 millones en 2014, lo que corresponde a 4.1% de las familias en el país.
El 75% de los hogares receptores de remesas se encontraba en los deciles que van del I al VI, es decir, familias que perciben ingresos inferiores a 9 mil 952 pesos al mes.
A su vez, mientras que 7.1% de los hogares en el primer decil recibían remesas, sólo 1.6% lo hacían en el sector de mayores ingresos.
La ciudad fronteriza de Tijuana fue el municipio que captó más remesas el año pasado, al recibir 377 millones de dólares, seguido de Puebla con 369 millones, Guadalajara con 352 millones, Morelia con 332 millones y Oaxaca con 291 millones.
cev