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Si bien las deducciones de impuestos serán insuficientes frente al alza de tasas de interés, la depreciación del tipo de cambio y los mayores precios de las gasolinas, fiscalistas recomiendan tener un mayor control de los gastos y ser más eficientes para sobrevivir 2017.
Para algunos fiscalistas, existen alternativas, aunque mínimas, para recuperar parte de los gastos que se enfrentarán este año, mientras que para otros serán necesarios estímulos fiscales para el ahorro y la inversión.
En un año que inició con la cuesta de enero y que se complicará con los eventuales aumentos indirectos de precios en mercancías y servicios derivados del gasolinazo, lo más aconsejable es hacer un esfuerzo para cumplir en tiempo y forma ante el fisco para evitar multas y recargos.
“Hay que pedir factura electrónica de todo, en especial de gastos médicos”, recomienda el director de Bettinger Asesores, Herbert Bettinger.
Si se las niegan, pueden acudir a la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon), dice su titular, Diana Bernal, quien en entrevista con EL UNIVERSAL adelanta que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) pronto dará a conocer una solución informática para facilitar la declaración de impuestos a las empresas como lo hacen hasta ahora para las personas físicas con las declaraciones de impuestos prellenadas.
“Pronto el SAT va a dar a conocer que contará con toda la información. Ya no será necesario subir todas las deducciones como empresario porque el SAT, ya las va a tener con el CFDI que es el Comprobante Fiscal Digital
por Internet”.
Cumplir requisitos, la clave. Pero la clave será el control, es decir, cumplir con todos los requisitos para hacer las deducciones, advierte el socio de impuestos corporativos de KPMG, Alfredo García.
Dice que para 2017 no habrá más deducciones de las limitadas que surgieron con la reforma fiscal. Para este año se incluyen deducciones nuevas para la compra de automóviles híbridos o eléctricos, bicicletas y otros conceptos en estímulos fiscales en materia de deporte de alto rendimiento.
El abogado fiscalista Herbert Bettinger afirma que serán insuficientes como las deducciones que se permiten para gastos en consultas con nutriólogos y sicólogos.
Lo más perjudicados con la cuesta de enero y el gasolinazo en el año, serán los de clase media alta y alta porque su deducción sólo puede ser de un poco más de 124 mil pesos, considera el especialista fiscal.
“Tristemente es lo único que podemos deducir: La salud con el seguro de gastos médicos mayores no es deducible 100%, es parcial”, lamenta.
Por eso afirma que como contribuyentes se tiene un problema que se agrava por la falta de liquidez por el pago de impuestos, el alza de las tasas de interés, aumento de la gasolina, la luz y el gas.
“Las deducciones no podrán compensar que la moneda perdió 30% el año pasado, cinco veces se ajustó la tasa de referencia y el incremento promedio de gasolina es de 20%; de la luz cerca de 12%, y el gas 14%; es un golpe muy fuerte al bolsillo de las familias”, asegura el fiscalista.
Bettinger dice que ojalá la Prodecon abogue por los contribuyentes para que haya más incentivos fiscales que fomenten el ahorro y la inversión.
