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noe.cruz@eluniversal.com.mx
Si a Petróleos Mexicanos el crimen organizado le perfora ductos, a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) le roba cable conductor de cobre 6.5 veces al día, afectando sus finanzas y a usuarios del servicio eléctrico.
La empresa pierde 62.7 millones de pesos anuales por este ilícito, por lo que se ha convertido en botín de los delincuentes que emplean uniformes similares a los de CFE para realizar los cortes del cable.
Este material aparece más tarde en el mercado negro o en negocios que compran fierro o metales.
Según información entregada vía la Plataforma Nacional del Transparencia, la delincuencia organizada le robó a la CFE en promedio mil 143 metros diarios de cable que conforman la red eléctrica y por la que fluye electricidad que se comercializa.
Los reportes elaborados por la dirección de administración de la CFE señalan que en 2015 los delincuentes se apropiaron de 417 mil 294 metros de cable de cobre que le representó a la empresa pérdidas por 62.7 millones de pesos. En ese año, la comisión detectó 2 mil 406 casos de robo de esta clase de material.
Pero no sólo se trata de la afectación económica, pues por cada corte de cable se provoca la interrupción del servicio de energía eléctrica en casas, comercios, negocios u hospitales de las zonas aledañas al robo del material.
Según información proporcionada por la CFE, cada metro de cable que le robaron tuvo un costo aproximado de 150.25 pesos.
Con la tendencia observada en el periodo de enero a abril de este año, se prevé que este ilícito va a tener un repunte en 2016.
En los primeros cuatro meses del año, la CFE perdió mil 174 metros de cable al día, lo que le representó una merma de 24.5 millones de pesos.
En total, de enero a abril, 142 mil 97 metros de cable fueron a parar a manos de bandas de delincuentes en 756 ilícitos registrados. Para este año, cada metro de cable tuvo un costo promedio de 172.41 pesos.
Por estos ilícitos, la empresa eléctrica presentó en 2015 mil 320 denuncias antes las autoridades correspondientes (3.6 por día), mientras que en el primer cuatrimestre el número de quejas asciende a 262 (2.1 por día), aunque el robo de cable aumenta.
La empresa viene acarreando este problema desde hace varios años. Entre 2011 y 2014, CFE detectó el robo de más de un millón 198 mil metros de cable eléctrico conductor.
En 2011, la comisión inició operativos coordinados con la Secretaría de la Defensa Nacional, de Marina, la Procuraduría General de la República y la Policía Federal para investigar este delito. Además, reemplazó tramos conductores con un cable conductor fabricado con una aleación de aluminio y fierro, menos valioso que el fabricado con cobre.
En marzo de 2015, la CFE anunció la aplicación de un nuevo sistema de monitoreo satelital para detectar la interrupción de energía en diferentes zonas del sur del país.
Jorge García Castillo, superintendente de la CFE en la zona sur, explicó que con este sistema se pueden monitorear las fallas de energía.
“Dicho sistema no fue establecido para combatir el robo de cobre, pero ayuda a disminuir el delito debido a que cuando el sistema reporta alguna falla o interrupción de energía, el personal llega a verificar el reporte y con base en ello se ha logrado detectar que en ocasiones es por intento de sustracción ilegal de algún transmisor”.
A finales de 2015, la empresa productiva del Estado se reunió con chatarreros o recicladores para pedirles que no acepten el cable que les ofrecen particulares. Incluso entregaron tabletas descriptivas para que estos negocios puedan identificar el tipo de cable que utiliza CFE en el tendido de la red eléctrica y no lo compren.
