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Pese a que entre 2012 y 2015 se registró un aumento en el número de adultos que usan servicios financieros en México, el ahorro en instrumentos informales como tandas o guardar el dinero en la casa se mantiene como práctica común para la población en México.
Según la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera, de 2012 a 2015 la población adulta que utiliza al menos un producto financiero pasó de 56% a 68%. Esto es, 12.7 millones de mexicanos se unieron al sistema financiero.
En contraste, de acuerdo con el documento elaborado por el Inegi y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), 56% de la población adulta mexicana carece de una cuenta de ahorro formal y 30 millones de personas guardan su dinero en casa y 15 millones ahorran en tandas.
“Si bien estas cifras nos muestran un importante avance, también nos hablan de que más de la mitad de la población no tiene una cuenta en una institución formal, por lo que es claro que falta mucho por hacer para tener un sistema financiero al que accedan todos los mexicanos”, dijo el presidente de la CNBV, Jaime González Aguadé.
En ese sentido, dijo que si bien 75% de los adultos en el país tiene celular, la mitad no tienen cuenta de banco.
“Estas cifras nos indican que existe un gran potencial para seguir impulsando el uso de la banca móvil en México”, enfatizó.
El presidente del Inegi, Julio Santaella, explicó que los temas abordados en la encuesta son administración de gastos; ahorro informal y formal; crédito informal y formal; seguros, ahorro para el retiro; remesas internacionales, así como uso de canales financieros.