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La alerta por la situación económica mundial y los riesgos para el sistema financiero está activa en México. Sin embargo, para Grupo Financiero Santander, la fortaleza de la banca en el país permitirá resistir cualquier posibilidad de contagio.
En entrevista para EL UNIVERSAL, Marcos Martínez, presidente del Consejo de Administración de la firma, comentó que ante la situación económica que se vive, algunas industrias pueden enfrentar problemas; sin embargo esto no afectará al sector bancario, el cual ya sufrió el impago a proveedores de Pemex o la crisis de las empresas vivienderas.
¿Se han cumplido las expectativas a dos años de ser aplicada la nueva reforma financiera?
—La reforma financiera está cumpliendo las distintas necesidades del país. Fue un acierto y la forma en que se ha instrumentado ha sido ejemplar.
¿Qué falta?
—Se han dado pasos en una combinación entre la reforma financiera y la actitud de las autoridades financieras incluyendo al banco central de querer aprovechar la salud del sistema financiero mexicano para ir más rápido que el mundo. Esto no necesariamente nos gusta mucho, porque te pones obstáculos por anticipado que no tienen otros sistemas financieros pero al mismo tiempo es un reconocimiento de que se han hecho las cosas mejor y que puedes ir más adelante del resto de los sistemas financieros. Si podemos trabajar y ser exitosos con marcos regulatorios más estrictos que en otros países y con requerimientos adicionales en términos de capital o reservas, se ha demostrado que el sistema financiero mexicano es muy eficiente.
¿El anuncio de aumento de tasa por parte del Banco de México se reflejará en el costo de los servicios?
—En la mayor parte de los productos no los veo porque son marginales a final de cuentas. Más que el impacto del incremento es la señal de que esto tiene una tendencia hacia la alza. Yo sí veo un producto que difícilmente puede mantener esa tasa de interés que es el hipotecario por los plazos tan largos específicamente y fuera de eso yo no veo ningún impacto, algo que realmente le cambie el escenario al deudor, absolutamente en ninguno de los casos. El efecto es totalmente marginal.
¿Cómo observa al sistema financiero mexicano ante la situación en otros bancos en China y Europa?
—Lo veo como en una isla. No sé si así vaya a permanecer por un largo periodo de tiempo porque México no está aislado del mundo; sin embargo seguimos siendo en términos relativos muy afortunados. Somos una economía que dependemos mucho más de Estados Unidos que del resto del mundo. Por mucho tiempo lo vimos como una debilidad del país y ahora es una fortaleza. México se ve poco afectado y su sistema financiero se ve de momento sin ninguna afectación. No puedo decir que esto va a seguir si la crisis mundial es de un largo periodo, pero difícilmente veríamos sufriendo a México lo mismo que sufre Europa, China o el mismo Latinoamérica. Sin decir que no pasaría nada, sigo viendo que México es una gran oportunidad y que tenemos la posibilidad de seguir creciendo de seguir generando empleo, a pesar de que el ambiente sea tan adverso como pocas veces se ha visto en la historia económica del mundo.
¿Ve algún riesgo de contagio?
—¿En qué sentido lo podríamos ver? En que los clientes no te pagaran. Puede haber algunas industrias que sufran pero que se vuelva un problema sistémico, en absoluto. México sigue viviendo un muy buen desarrollo y en ese sentido no hay contagio; no estoy dejando de ser realista y pueden sufrir algunas carteras. Pero lo de proveedores de Pemex ya nos pasó el año pasado. Las vivienderas ya las sufrimos y ya nos pegaron, pero si te fijas la afectación fue mínima porque la banca está muy fuerte.
¿En infraestructura se percibe algún problema?
—No, al contrario. Le veo un gran potencial que está pendiente de llevarse a cabo y ahora que vienen los recortes y que están siendo en gran medida en proyectos se inversión e infraestructura que estaban por llevarse a cabo, en el caso de Pemex la decisión me parece la correcta, diciendo que no lo pueden realizar pero alguien más lo puede hacer y veo que frente a la cautela para entrar a ese tipo de proyectos, a los inversionistas los veo con interés de participar.
¿Ve a los grandes inversionistas de energía a pesar de los actuales precios en el sector?
—Lo que probablemente suceda es que se estén difiriendo en ese tipo de proyectos que no urge y parece que no va a urgir en los próximos meses pero cuando sea el momento y abran la opción van a venir, estoy segurísimo que va a ocurrir. No tienes que esperar a que el precio del petróleo regrese a 100 dólares para verlo.
Entonces, ¿para Santander cuál es la preocupación en este escenario?
—Básicamente cómo seguimos avanzando bien la franquicia adaptándonos a lo que vaya pasando en el medio. La volatilidad no nos afecta porque el banco tiene desde hace mucho una evolución a nivel grupo de cómo manejar los diferentes tipos de riesgos y somos un banco que opera con un nivel de riesgo medio o medio bajo y en los mercados que es donde más efecto tienes en esto somos un banco muy conservador.
En 2016, ¿cuál es la perspectiva para el banco en México?
—Estamos aprovechando la circunstancia de que México vive una mejor posición de lo que pasa en otros lados y por lo tanto, aunque en otros mercados somos más cautelosos porque hay que serlo, en México no vamos a frenar el crédito al consumo y no pensamos que haya un deterioro en esa cartera o la de empresas. Que tendremos clientes que tendrán más problemas que antes, seguramente sucederá, pero el banco está preparado para ese tipo de riesgos. No estamos ni cautelosos ni reservados, sin preocupación de estar tomando riesgos que no deberíamos.
¿Su cartera de energía se mantiene igual?
—Sí. Nosotros en energía tenemos como 3% de la cartera y eso incluye a las dos principales empresas de generación de energía y a sus proveedores y en términos generales la cartera tiene muy buen comportamiento por lo que hay que estar listos para apoyar y ayudar. Queremos aportar ideas sobre qué se puede hacer para transitar más rápido en el pago a proveedores de Pemex. Este tipo de situaciones no son nuevas para nosotros ni nos espantan ni nos sorprenden, me refiero al sistema financiero mexicano. En la medida que lleves ideas se va a arreglar mejor y algunas estamos teniendo ya.
