Más Información
cartera@eluniversal.com.mx
La economía mexicana enfrenta un panorama en 2016 que tiene como principales riesgos los menores precios del petróleo, que van a seguir condicionando la cotización del dólar y los recortes al gasto público, alertaron especialistas.
En opinión de Alfredo Coutiño, director para América Latina de Moody's Analytics, el panorama luce desfavorable para este año, debido principalmente a la reciente evolución de los petroprecios.
Coutiño pronosticó que la economía mexicana siga creciendo por debajo de 3%, pues anticipa un ritmo entre 2.5% y 2.8% para 2016, lo que si bien supera 2.4% esperado por el consenso de analistas para 2015, descartó que represente una recuperación importante.
La última encuesta quincenal de Banamex a 25 analistas privados, reveló una reducción de 2.7% a 2.6% en la previsión de crecimiento económico para 2016. Vector Casa de Bolsa es el participante más conservador al estimar un ritmo de 1.8%, seguido de BNP Paribas con 2.3%.
Nomura, por el contrario, es la institución más optimista al esperar un crecimiento de 3.5%, seguida de Santander con 3%.
El barril de petróleo nacional bajó de 45.45 dólares al cierre de 2014, a 26.93 al 30 de diciembre de 2015, lo que representó un desplome anual de 18.52 unidades, equivalente a 40.7%.
El precio promedio de 2015 fue de 44.4 dólares, la mitad de 87.6 unidades registradas en 2014, y se prevé que la cotización siga baja debido a la sobreoferta que hay en el mercado, ante la entrada de la producción iraní y la posibilidad de que Estados Unidos pueda exportar crudo.
Banamex estima que la mezcla mexicana registre un precio promedio de 43 dólares en 2016, lo que de materializarse implicará un menor nivel que en 2015.
La institución financiera también advierte de un dólar más caro para este año.
Al precio promedio al mayoreo lo ubica en 16.91 pesos para 2016, superior a 15.88 unidades observadas en 2015. La diferencia observada entre cotizaciones al mayoreo y menudeo osciló 30 centavos el año pasado, lo que significa que el dólar en ventanillas puede rondar 17.21 unidades en 2016.
Rafael Camarena, economista sénior de Santander, expresó que la producción de petróleo es lo que más preocupa para este año.
Aunque México no tiene una economía petrolizada, los ingresos públicos siguen dependiendo del crudo, aun cuando el gobierno ha logrado disminuir el riesgo con las coberturas, comentó James Salazar, analista económico de CI Banco.
La baja petrolera reduce el margen de maniobra del gobierno y es la responsable de los recortes presupuestarios en los ejercicios de 2015 y 2016, lo que finalmente se traduce en una menor demanda de bienes y servicios que conlleva a un menor crecimiento económico.
“Es muy probable que los petroprecios continúen fluctuando con mucha incertidumbre, pues aún falta ver el impacto que va a tener la entrada al mercado de la producción de Irán y además existe la posibilidad de que Estados Unidos comience a exportar petróleo”, concluyó el especialista de CI Banco.
Consumo privado e inversión. En el contexto de los bajos precios del petróleo y un dólar más caro, los expertos estiman que la economía mexicana va a tener dos motores que pueden dinamizar la actividad del país.
“El mercado externo nacional va a estar determinado por Estados Unidos, país del que se espera una recuperación económica gradual, lo que debe beneficiar a México. El mercado interno ha estado dando señales de recuperación más por el efecto inducido de la política fiscal que mantiene el déficit público”, manifestó Coutiño.
El año pasado se registró una recuperación de las remesas, lo que ha fortalecido el consumo privado; pero, en este 2016, aun con la mejora de la economía de Estados Unidos, no se prevé que el flujo de dólares se vaya a acelerar, por lo que ese efecto en el consumo se va a moderar, manteniendo el crecimiento económico por debajo de 3%, añadió el directivo de Moody's Analytics.
Opinó que las reformas estructurales no han incrementado la inversión productiva en México.
“Se han establecido contratos, se han firmado convenios, pero en datos duros la inversión fija bruta en el país, al menos hasta finales de 2015, no ha mejorado, continúa alrededor de 22% del PIB, que es el mismo nivel con que comenzó esta administración”, concluyó.
