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El talón de Aquiles de esta administración en materia energética es la caída de la producción de crudo, por lo que en la primera mitad del sexenio México perdió presencia en el ranking internacional de organismos y publicaciones especializadas del sector.
Según Oil and Gas Journal, Energy Intelligence Group (PIW), BP y Petróleos Mexicanos (Pemex), el país perdió lugares como productor entre 2011 y el cierre de 2014, al ser desplazado por Irak, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos y Venezuela.
Al inicio del sexenio, México se ubicaba en el séptimo sitio, produciendo 2 millones 576 mil barriles diarios, y hacia finales del año pasado descendió al décimo lugar. Para entonces, los niveles de extracción promediaron 2 millones 429 mil barriles por día, una reducción de 5.7%.
El problema podría agravarse el próximo año, pues con los resultados que se están obteniendo es posible que el país se rezague más frente al resto de las naciones productoras.
Tentativamente, según datos que Pemex Exploración y Producción presentó en Londres el pasado 6 de octubre, México estaría cerrando este año con un volumen de producción de crudo promedio anual de 2 millones 262 mil barriles por día.
Por empresa, Pemex perdió cuatro lugares como productor, al pasar de la cuarta a la octava posición.
Hacia finales de 2011 sólo las empresas Saudi Aramco (Arabia Saudita), NIOC (Irán) y PDVSA (Venezuela) producían más que Pemex. Hoy, aún sin contabilizar los niveles de extracción de 2015, Rosneft (Rusia), CNPC (China), KPC (Kuwait), PDVSA (Venezuela) e INOC (Irak) están extrayendo mayores volúmenes que la empresa productiva del Estado.
Esta situación propició que en el renglón de ventas por empresa, también descendiera un sitio.
En 2011, la petrolera mexicana reportó que el valor de la comercialización total de hidrocarburos se ubicó en 80 mil 6423 millones de dólares. El año pasado, la cifra fue de 122 mil 984 millones de dólares.
Información de Pemex señala que dos son los factores que han propiciado que el país pierda presencia en el escenario petrolero internacional: las limitaciones presupuestales, y que los principales campos petroleros se están haciendo viejos y aportan cada vez menos volúmenes de petróleo crudo, por efecto llamado “declinación natural”.
Tan sólo entre 2013 y 2014, Pemex sufrió recortes presupuestales que suman 102 mil millones de pesos, lo que impacto sensiblemente los ritmos de operación de la petrolera.
El renglón en el que México pudo mantener su posición en el ranking mundial fue en materia de reservas, pues actualmente se ubica en el lugar 17, el mismo que tenía al finalizar la pasada administración.
Esta situación se explica en parte por la caída en la producción, porque si México hubiese mantenido una tendencia al alza, el periodo de vida de las reservas habría sido más corto, dado que los nuevos descubrimientos no han logrado compensar los niveles de extracción.
En 2014 y 2015, por ejemplo, la llamada tasa de restitución integrada de reservas probadas, que son los volúmenes de donde se extrae el petróleo y el gas para cubrir la demanda nacional y para exportar han sido de las más bajas desde 2008, ubicándose en 67.8% y 67.4%, respectivamente.
Esto significa que por cada 10 barriles de petróleo extraído, sólo se han logrado compensar con nuevos descubrimiento casi siete.
A pesar de ello, se ha logrado que las reservas probadas tengan un periodo de vida 10.1 años en promedio entre 2013 y 2015.
