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El ex presidente de México, Carlos Salinas de Gortari, dijo que no importa qué tan buenas sean las reformas estructurales, si no se instrumentan adecuadamente. Para el ex mandatario, las reformas tienen tres momentos: cuando se debaten, cuando se aprueban y el periodo de su instrumentación.
“El más importante es el tercero, porque si no se instrumentan adecuadamente, no importa que tan buenas sean, no van a dar los frutos que de ellas se esperan”, aseguró durante un foro organizado por The Economist.
Salinas dijo que la economía mexicana no creció lo esperado en los últimos años, pues durante dos décadas no hubo reformas y una de ellas fue una “década perdida”.
Al ser cuestionado sobre la situación económica del país, comentó que no crece porque el crédito es muy caro.
“Me llamó la atención de un periódico en España que promovía las tasas de interés a 3%, yo quiero preguntarle a los empresarios mexicanos que están aquí, que enfrentan competencia de fuera, que vienen con financiamiento a 3%, ¿cómo pueden competir cuando aquí los magníficos anuncios son que tienen la magnífica tasa de 18% para empezar?”, cuestionó.
Sobre su gestión como presidente de México (1988-1994), afirmó que las cifras y hechos demuestran que el Tratado de Libre Comercio tuvo efectos positivos en la economía, pero no continuó a causa de la crisis de 1995.
“En ese momento se interrumpió el proceso de crecimiento en México y vino una recesión por la crisis del 95”.
Sobre los programas sociales, dijo que “hay que distinguir entre programas sociales que son meros paliativos compensatorios de la situación de pobreza que se vive en nuestros países a programas que lo que buscan es empoderar a los que menos tienen para que dejen de ser objetos del apoyo oficial y se conviertan en objeto de su propia transformación”.
En este aspecto, hay oportunidad para la sociedad civil y participativa “para exigir su derecho y hacer vigente ese Estado derecho”, subrayó.
Pide decencia a Trump. Sobre Donald Trump, Salinas de Gortari recordó que se trata de un inmigrante por definición, como el resto de los ciudadanos de un país de inmigrantes como Estados Unidos y aseguró que sus acciones responden a un populismo electoral como en el caso de McCarthy.
“¿Cuándo se cayó esta campaña del señor McCarthy? Cuando hubo alguien que le hizo la pregunta fundamental, ‘señor, ¿tiene usted un mínimo de decencia?’ Pues eso le preguntaría yo a Trump”, afirmó.