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La Comisión Federal de Electricidad (CFE) y su sindicato iniciarán las negociaciones para reestructurar su actual esquema de pensiones en mayo del próximo año, anunció el director de la empresa productiva de Estado, Enrique Ocho Reza.
El funcionario explicó que el pasivo laboral asciende a 591 mil millones de pesos, lo que representa un serio problema para mantener la estabilidad financiera de la empresa.
Al participar en el 25 Aniversario del México Summit organizado por The Economist, dijo que cuando venga el proceso de negociación del contrato colectivo de trabajo se prevé alcanzar un acuerdo para reestructurar el pasivo laboral, lo que incluiría un “mecanismos de incentivos” para trabajadores y empleados que brinde viabilidad a futuro.
Dijo que los afiliados al Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (SUTERM) ya trabajan con empresas privadas del sector eléctrico y bajo condiciones laborales diferentes a las de CFE, lo que va a facilitar el tránsito hacia el nuevo esquema laboral que surgirá en mayo del próximo año.
Gasolina UBA. También presente en el evento, el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell anunció que el Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos (Pemex) aprobó la reconfiguración de la refinería de Tula, con lo que en un plazo de dos a tres años se podrá disponer de gasolinas de Ultra Bajo Contenido de Azufre (UBA).
Actualmente, añadió, la empresa productiva del Estado negocia con fondos financieros la inversión para esta reconfiguración y las de las refinerías que faltan por llevar ese proceso.
Anunció que como parte del esquema de formación de recursos humanos para el sector energético, “en los próximos días se anunciará el primer acuerdo con una de las grandes institución de educación superior del país, el Tecnológico de Monterrey, para formar 15 mil técnicos electricistas”.
Al hacer un balance de las dos primeras rondas de licitaciones para la adjudicación de campos petroleros, el encargado de la política energética de México comentó que “vamos bien, tenemos un porcentaje de éxito de 36%, cuando el promedio internacional oscila entre 20% y 50%, y aun cuando el precio del petróleo está deprimido”.
Y en materia de transparencia, “no queremos ver en el sector energético concentración económica como se ve en otras actividades, queremos un sistema individual privado altamente diversificado”.
Añadió que “hay siete empresas petroleras nuevas de mediano tamaño que nos pueden dar 90 mil barriles diarios de crudo hacia 2019, e inversiones por casi 5 mil 800 millones de dólares en los primeros años, así como 5 mil empleos directos”.
En tanto, Alberto de la Fuente, director de Shell México, calificó como exitoso el proceso de asignaciones de bloques por los altos índices de transparencia. Comentó que hay al menos cinco áreas que deben reforzarse.
“Las reglas del juego deben ser lo más simple posibles y apegadas al contexto internacional; un modelo de contrato menos rígido; los términos fiscales deben fomentar inversiones de largo plazo; materializar los campos en los que se requiera mayores capacidades”, dijo.
