Fitch Ratings recortó el jueves la calificación de deuda de Brasil hasta dejarla al borde del nivel especulativo, y advirtió que el país podría perder pronto su nota de grado de inversión por el deterioro de las finanzas del Gobierno, en medio de una recesión prolongada y de la persistente incertidumbre política.
La agencia redujo la calificación de Brasil a "BBB-" desde "BBB" y mantuvo el panorama negativo para la nueva calificación, lo que sugiere que podría aplicar otra rebaja dentro el próximo año.
Si Fitch realiza otra rebaja en la nota soberana de Brasil serían dos las grandes agencias que le asignan a la deuda de Brasil una calificación en territorio especulativo.
"El panorama negativo refleja la visión de Fitch de que el bajo desempeño económico y fiscal probablemente persistirá, y que la incertidumbre política podría seguir afectando la confianza general", dijo Fitch en un comunicado.
La agencia agregó que esa incertidumbre "retrasaría un cambio en la inversión y el crecimiento".
La moneda brasileña, el real, borraba su avance inicial y perdía cerca de un 0,5 por ciento tras el comunicado.
La decisión se produce a poco más de un mes de que Standard& Poor's despojó a Brasil de su preciado grado de inversión. S&P dijo que los crecientes problemas políticos del país habían complicado la política económica del país.
Una segunda rebaja a especulativo podría tener un impacto aun más fuerte sobre el mercado que el primero, ya que muchos inversores no adquieren bonos que no cuenten con notas de grado de inversión otorgadas por al menos dos calificadoras.
Pero estaba previsto que Fitch rebajase la nota de Brasil en al menos un escalón, para estar en línea con las calificaciones de otras agencias.
El 11 de agosto, Moody's Investors Service degradó su nota para el país al menor nivel dentro del grado de inversión con un panorama estable.
tcm