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El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) se enfocará en propuestas fiscales viables, acordes con la nueva realidad, y dejará para otro momento el proyecto de generalizar el IVA para alimentos y medicinas.
En conferencia de prensa, en donde se dio a conocer el nuevo pronóstico de crecimiento para este año de 2.7% desde el 2.8% que se estimó el mes pasado, integrantes del instituto dijeron que sólo buscarán incentivos al ahorro y la inversión.
“No renunciamos a nuestra propuesta, pero es importante buscar esos incentivos; no nos vamos a desgastar en cuestiones de tasas. Hay que ver las batallas que se van ganando”, dijo el presidente del Comité de Estudios Fiscales, Arturo Carvajal.
Aseguró que en las mesas de negociación que se abrieron con la Secretaría de Hacienda a raíz de la reunión con el titular de la dependencia, Luis Videgaray, no plantearán gravar de manera general todos los productos con el IVA y tampoco ampliar las deducciones.
“En el documento base coincidimos con el sector empresarial en dos vertientes porque en aquel momento no contemplábamos el tema de la coyuntura de los precios del petróleo; no están fuera de la mesa, pero que se vayan adaptando a las condiciones y no se vean afectados en el proceso de negociación”, dijo.
Enfatizó que lo importante es que hay un cambio de actitud, pese a que saben que no van a proponer nuevos gravámenes ni nuevos impuestos.
Dijo que los trabajos que se harán con el subsecretario de Ingresos, Miguel Messmacher, es independiente a lo que habían presentado junto con el Grupo de los Seis, del que forman parte con el Instituto Mexicano de Contadores Públicos y la Academia de Estudios Fiscales, entre otros organismos.
Por su parte, la presidenta del IMEF, Nelly Molina, señaló que si en el pasado las autoridades no los tomaban en cuenta, ahora aprovecharán que se les abren las puertas.
Sin embargo, no detalló las 15 propuestas que presentaron con nombre, ya que hasta que se tenga algo más concreto se darán a conocer.
Apoyos fiscales. Ante la posibilidad de que el gobierno mexicano anuncie algunos estímulos fiscales para reactivar la economía, José Antonio Quesada, socio líder de clientes y mercados de PWC, dijo que estas medidas deben definirse antes de que termine 2015 ante el complicado escenario de volatilidad y bajos precios del petróleo que se vive en los mercados internacionales.
“Después de las reformas estructurales falta terminar de calibrar el impacto de algunas de ellas. Yo creo que sí sería sumamente deseable que se empujaran estos estímulos desde ya, sin esperar a ver cómo cierra el año e independientemente de que se recupere la economía. Hace falta un empujón adicional que yo no dejaría en 2016”, dijo en entrevista después de presentar el Premio Nacional de Investigación sobre Finanzas Estatales.
Según el especialista de la consultora, la conformación del Congreso con mayoría del PRI y los partidos aliados facilitará la discusión del Presupuesto 2016, en el cual el gobierno no tendrá mucho margen para aumentar el gasto.
“La recaudación ha aumentado y la economía también ha estado reportando recuperación en el consumo. En este sentido, hay signos esperanzadores y, por el otro lado, en el tema del gasto no habrá grandes cambios. No hay mucho margen para que se modifiquen los patrones que hemos estado viendo hasta este momento”, explicó.
Añadió que en la próxima discusión presupuestal, debido a la presión por menos recursos que se tendrá en 2016, se deberá tener cuidado para evitar endeudamientos innecesarios por parte de los estados, particularmente en entidades con elevados niveles de deuda.
“Los estados que tendrán problemas serán aquellos con mayor injerencia de energéticos en sus ingresos, y los que tienen que tienen que revisar sus endeudamientos de otros periodos, como Coahuila, Veracruz, Michoacán”, dijo.
