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No sólo se requiere una nueva reforma fiscal para combatir la informalidad, sino también cambios en materia laboral y a la seguridad social, advirtieron especialistas.
Coincidieron en que si bien el nuevo Régimen de Incorporación Fiscal (RIF) que surgió como parte de la reforma hacendaria está dando resultados, no se ha traducido en más inscripciones al IMSS.
En el seminario sobre problemas económicos en el cual se abordaron las políticas públicas para enfrentar la informalidad, el investigador de la Unidad de Posgrado de Economía de la UNAM, Clemente Ruiz, consideró que el RIF debe permanecer porque ha demostrado que es efectivo, pero para ello se deben recuperar los niveles del gasto público.
Dijo que se han dado logros a través del RIF para incorporar a los informales a la economía formal, pero no es suficiente porque no se ha dado un sistema universal de salud ni de seguridad social.
Francisco Javier Arias, de la Facultad de Economía de la UNAM, dijo que uno de los retos para enfrentar la informalidad es que las cuotas del IMSS sean regresivas. “Sería muy interesante ver cuántos de los RIF han optado por inscribirse al IMSS”.
Propuesta no resta recursos. La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) expuso al gobierno que la propuesta fiscal que presentaron la semana pasada no tiene el fin de quitarle recursos sino ampliar la base gravable.
Pese al rechazo del Ejecutivo, dijo que ellos ponen en la mesa de debate su proyecto para que se analice y mejore donde sea posible.
“Convocamos a los organismos de la sociedad, a la Secretaría de Hacienda y al Congreso a realizar un análisis profundo de las medidas que ponemos a su consideración, los convocamos a debatir y juntos encontrar las mejores fórmulas con voluntad de alcanzar acuerdos”, expuso la confederación.
