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ruben.migueles@eluniversal.com.mx
Las condiciones laborales de la mayoría de los trabajadores domésticos en México son precarias, de acuerdo con información del Inegi.
Gran parte de las personas que se emplean en estas labores no cuentan con un contrato escrito, no tienen acceso a servicios de salud y, en el mejor de los casos, reciben hasta dos salarios mínimos por la prestación de sus servicios.
De acuerdo con un reporte del Inegi, a propósito del Día Internacional del Trabajo Doméstico (mañana 22 de julio), el trabajo doméstico se caracteriza por realizarse de manera aislada, lo que contribuye a la desprotección y vulnerabilidad de las personas que se ocupan en esta actividad.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) señala que, una vez empleadas, estas personas se ven inmersas en relaciones de poder muy desiguales con los patrones y hacen frente a un elevado nivel de aislamiento, maltrato, abuso, humillación y discriminación.
En México hay 2 millones 480 mil trabajadores domésticos remunerados, cifra que representa 4.8% del total de ocupados, de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) correspondientes al primer trimestre de 2017.
De cada 100 ocupados en esta actividad, 90 son mujeres.
Destaca que en ocupaciones como empleados domésticos, cuidadores de personas, lavanderos, planchadores y cocineros domésticos la presencia de mujeres se incrementa a más de 93 mujeres de cada 100 trabajadores.
La mayor presencia de hombres es en actividades como choferes, vigilantes, porteros y jardineros, todos en casas particulares, con porcentajes superiores a 94.4% de los ocupados.
Contar con un contrato que formalice la relación laboral es determinante en cuanto a la protección legal de los derechos de los trabajadores. En ese sentido, 99 de cada 100 ocupados en esta actividad se encuentran laborando sin contrato escrito, lo que implica que no cuentan con las prestaciones que marca la ley.
Respecto a las prestaciones de salud, siete de cada 10 trabajadores domésticos remunerados no cuentan con prestaciones de acceso a instituciones. Por sexo, 75% de las mujeres se encuentran en esta situación por 58.2% de los hombres.
Según la duración de la jornada laboral, 59.5% de las mujeres cumplen tiempos menores a 40 horas y 38.6% trabajan 40 horas o más a la semana, en tanto que siete de cada 10 hombres laboran 40 horas o más a la semana.
Tres cuartos de los trabajadores domésticos reciben como ingreso hasta dos salarios mínimos o menos.
En México, 5.8% de los trabajadores domésticos remunerados son analfabetas. El porcentaje de hombres en esta situación es de 6.4%; la de mujeres es 5.7%.
Cuatro de cada 10 trabajadores domésticos tienen algún grado de secundaria, 32% sólo concluyó la primaria y 20.9% no finalizó los grados de primaria.
Sólo uno de cada 10 trabajadores domésticos remunerados tiene al menos un año cursado y aprobado en el nivel medio superior o superior.