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Regresa el empresario Carlos Slim Helú a la puja por áreas contractuales petroleras que el gobierno federal ofertará en las rondas de licitación 2.2 y 2.3.

A través de la empresa Carso Oil and Gas, Slim Helú se inscribió y obtuvo la precalificación para participar por alguno de los bloques de la ronda 2.3, que involucra 14 áreas de 200 kilómetros cada una en Burgos, Veracruz y Tampico-Misantla.

Esta empresa había participado anteriormente en la primera licitación de la ronda 1, pero sin suerte.

La mitad de estas áreas, técnicamente contienen gas y l   a otra mitad, petróleo tipo ligero, de acuerdo con la información dada a conocer por la Comisión Nacional de Hidrocarburos.

El organismo regulador anunció los nombres de las empresas que aprobaron la precalificación y que serán las únicas que podrán participar en estas dos licitaciones.

En el caso de la ronda 2.2, que involucra 10 áreas contractuales de 400 kilómetros cada una, localizadas en la Cuenca de Burgos y Cinturón Plegado de Chiapas, que puede calificarse como “una licitación de gas”, de acuerdo con el presidente comisionado de la CNH, Juan Carlos Zepeda, se trata de nueve empresas que pujarán por alguno de estos contratos.

Cinco empresas irán en lo individual: Ecopetrol Global Energy (Colombiana), la mexicana Geo Power Solution SAPI, la canadiense Gran Tierra México Energy, y las mexicanas Iberoamericana de Hidrocarburos y Persus Exploración Terrestre.

Agrupadas en consorcio están: el grupo mexicano conformado por Iberoamericana de Hidrocarburos, con Petróleos Monterrey SAPI y Servicios PJP4 de México.

El consorcio México-Estados Unidos de Newpek Exploración y Extracción con Verdad Exploration Mexico.

El consorcio de origen méxico-canadiense Sun God Energía de México, con Jaguar Exploración y Producción de Hidrocarburos, y el México-español conformado por Tecpetrol Internacional SL y Grupo R Exploración y Producción.

Para lograr la precalificación, las empresas participantes debieron acreditar experiencia internacional o algún contrato como operadores; un capital de 500 millones de dólares si se inscribieron como operadores o 300 millones más 200 millones en el caso de las empresas socias.

El modelo de contrato en esta licitación de la ronda 2.2 será de licencia, que otorga al contratista el derecho de explorar, así como extraer a su exclusivo costo y riesgo los hidrocarburos propiedad del Estado en el área contractual.

El contratista tendrá derecho a la transmisión onerosa de los hidrocarburos producidos, siempre que, conforme a los términos del contrato, se encuentre al corriente en el pago de las contraprestaciones del Estado.

Para la licitación 2.3, que involucra 14 áreas contractuales de 200 kilómetros cada una: cuatro en la Cuenca de Burgos, tres en Veracruz, una en Misantla y seis en Tabasco, de donde la mitad aportará gas y la otra mitad crudo tipo ligero, lograron precalificar 12 empresas en lo individual.

Carso Oil ang Gas, DEP PYG, Ecopetrol Global Energy, Geo Power Solution, Gran Tierra Mexico Energy, Grupo R Exploración y Producción, Iberoamericana de Hidrocarburos, Jaguar Exploración y Producción de Hidrocarburos, P&S Oil and Gas, Persus Exploración Terrestre, PetroBal y Tonalli Energía.

En consorcio van: el grupo mexicano conformado por Iberoamericana de Hidrocarburos con Petróleos Monterrey y Servicios PJP4 de México; el grupo México-Estados Unidos Newpek Exploración y Extracción con Verdad Exploration México; el consorcio mexicano de NG Oil and Gas con AINDA Consultores y Petróleos Madere; el consorcio México-uruguayo de Petroenergy con Química Apollo, y el grupo mexicano de Promotora y Operadora de Infraestructura con Consorcio petrolero 5M del Golfo.

Además, participan del mismo modo el consorcio méxico-estadounidense Roma Exploration and Production con Tubular Technology, GX Geoscience Corporation, Suministros Marinos e Industriales de México y Golfo Suplemento latino, y el grupo méxico-chino de Shandong Kerui Oilfield Service Group con Sicoval MX y Nuevas Soluciones Energéticas.

En la ronda 2.3, prácticamente todas las empresas que precalificaron en la ronda 2.2 están participando de nueva cuenta.

En este caso no se pidió experiencia como empresas sino capacidades técnicas a través del personal y un capital de 100 millones de dólares para las operadoras y si van en consorcio, 60 millones para la operadora y 40 millones para los socios.

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