El anuncio que hizo este viernes la firma Fitch Ratings de reducir la perspectiva de su calificación sobre México de “estable” a “negativa”, puede entenderse como una advertencia de que si el gobierno no mejora en su crecimiento económico y reduce su elevada deuda, la calificadora ubicaría a nuestro país entre las naciones con un elevado riesgo de que no pueda pagar sus compromisos financieros.
Las calificaciones que ponen agencias como Fitch pueden entenderse como una categoría de países según su capacidad de pago de deudas contraídas y las condiciones que ofrecen para que los inversionistas extranjeros lleguen con su capital a realizar negocios.
En ese sentido, la calificación máxima es la “AAA”. Un país evaluado con esta nota prácticamente no representa ningún riesgo para pagar cualquier tipo de deuda o compromiso financiero que tenga y ofrece el escenario ideal para la llegada de inversión. Alemania o Estados Unidos se encuentran en esta categoría.
Al igual que una calificación escolar, estas se degradan conforme cambia la letra. Actualmente México se encuentra en la categoría “BBB” de Fitch, la cual significa que existe un riesgo moderado de que incumpla sus compromisos financieros.
Además de la calificación, Fitch asigna una perspectiva a cada nota que pone a un país. Con esto, México pasó de “estable” a “negativa” por el bajo crecimiento, deuda y el riesgo que representa la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos. En términos simples, lo que Fitch advirtió hoy es que según su evaluación, México corre el riesgo de bajar en su nota si no mejora en estos aspectos, condición que sería muy mal vista por inversionistas.
En un escenario hipotético, si México bajara un poco su calificación, pasaría a “BB” categoría que ya señala un alto riesgo para pagar deudas.
Hacia abajo, se llega a las “CCC”, donde un país en este rango ya representa un riesgo real de no poder pagar sus compromisos financieros. En esta mala categoría se encuentran países como República del Congo.
¿QUÉ CALIFICA?
En términos sencillos, una agencia como Fitch evalúa todos los aspectos económicos de un país que garanticen que tiene ingresos para pagar sus deudas y que en su territorio existen las condiciones para que cualquier inversionista pueda abrir una empresa o invertir su dinero.
Según el Banco de México el trabajo de una agencia disminuye parte de los costos que tendría que realizar un inversionista de manera individual al analizar cada uno de los elementos económicos de un país para establecer un negocio.
Además, este tipo de evaluaciones también se hace con las empresas, las cuales dependiendo su crecimiento, historial y posición en el mercado se determina qué tan atractivas son para invertir en ellas.
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