La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, defendió su inocencia en el juicio por negligencia contra ella en París, pero reconoció que no valoró los riesgos de fraude en el contencioso que terminó en una indemnización millonaria al empresario Bernard Tapie.

En su declaración final ante los jueces y parlamentarios de la corte especial que la juzga desde el pasado lunes, Lagarde se mostró firme en sus convicciones de que actuó con honestidad.

Lagarde, acusada de “negligencia” en el ejercicio de sus funciones en 2007 y 2008 mientras era ministra de Economía de Francia, conocerá el lunes la decisión de la Corte de Justicia de la República,

Todo apunta a que la responsable del FMI saldrá absuelta, sobre todo después de que la Fiscalía insistió en que no hay elementos para declararla culpable.

La ex ministra, de 60 años, asumió sus decisiones en la gestión del contencioso con Tapie, en particular decantarse por el procedimiento controvertido del arbitraje en lugar de continuar la vía de los tribunales, aunque al mismo tiempo hizo notar que no seguía el día a día de las discusiones, absorbida por otros aspectos de su misión al frente del departamento de Finanzas.

Al final, el resultado del arbitraje fue favorable al empresario por la venta de Adidas, que tuvo que traspasar al entonces banco público Crédit Lyonnais, y el costo para las arcas públicas fue de 403 millones de euros, incluida una partida polémica de 45 millones en concepto de indemnización por daños morales para Tapie y su esposa.

Nadie le avisó, dijo Lagarde, de la posibilidad de que en ese arbitraje hubiera malversaciones y reconoció que no tuvo en cuenta “el riesgo de fraude”.

Fue el único error que admitió. El resto de su declaración lo dedicó a insistir en que había actuado “en consciencia” y confiando en sus asesores, con “el objetivo de defender el interés general”.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses