Ante el nuevo escenario de las elecciones en Estados Unidos con el triunfo de Donald Trump, los dipudos no deberían precipitarse en aprobar el decreto de Presupuesto para 2017 sin analizarlo y adecuarlo a la nueva realidad, consideró México Evalúa.
"Me parece que el Legislativo tendría en este momento, en lugar de precipitarse a aprobar este presupuesto que fue diseñado en otro escenario macroeconómico, tendría que dedicar este día en quė aspectos tendria que incidir el nivel de gasto que traemos", dijo la coordinadora del programa de Gasto y Rendición de Cuentas, Mariana Campos.
Consideró que más que pensar si es suficiente el recorte al gasto para el próximo año, hay que ver el impacto del tipo de cambio y tasas en la deuda pública porque subirá el costo financiero y su efecto en el cumplimiento de la meta de déficit.
Se necesita reflexionar antes de aprobarlo, aseguró la coordinadora del programa de Gasto y Rendición de Cuentas de la organización en conferencia de prensa en donde se presentó el estudio Las dos caras de tu moneda, una mirada a la expansión del gasto público.
Mariana Campos, argumentó que se necesita una disciplina presupuestal de frente a la creciente deuda pública que se registra en los últimos años.
"En la primera parte del sexenio se observan muchos cambios significativos tanto en las fuentes de financiamiento del gobierno como en las prioridades de gasto", afirmó.
El diputado Vidal Llerenas dijo que tenemos un problema porque no se ha dado una discusión a fondo en torno a lo que se está gastando y cómo.
"Hay un déficit de transparencia y rendición de cuentas", afirmó.
Como ejemplo, el diputado señaló se ha llegado a los absurdos porque se está incrementando en 20 mil millones de pesos los aprovechamientos en la Ley de Ingresos para 2017 que casualmente no son recursos participables y no se sabe para que serán utilizados.
En el reporte presentado Las dos caras de tu moneda, una mirada a la expansión del gasto público, se analiza la forma de financiamiento del presupuesto Federal a partir del incremento de los ingresos tributarios obtenidos con la reforma hacendaria, la caída de los petroprecios, el surgimiento del impuesto a las gasolinas y el diesel, la deuda creciente y el uso de patrimonio de la deuda no registrada para incrementar la liquidez del gobierno federal.
También la forma en que se está gastando el esfuerzo de los ciudadanos con sus contribuciones, en donde se pondera que más de la mitad del aumento se registró en transferencias, subsidios y fideicomisos; se analizan las inversiones, el costo de la deuda y la poca información sobre su beneficio y su control y el gasto el sueldos y prestaciones.
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