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El pago del servicio de la deuda es muy oneroso y reduce el espacio fiscal en las finanzas públicas, por lo cual el superávit primario de 0.4% del Producto interno Bruto (PIB) propuesto en el paquete económico de 2017 para no endeudarnos más, es insuficiente para una muerte lenta por gangrena, advirtió el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
“Una crisis económica es como un infarto, pero lo que observamos hoy, [con la deuda] es como una muerte lenta por gangrena]”, alertó el director del centro, Héctor Villarreal.
Durante el análisis del paquete económico 2017, estableció que el problema en México no es tener una deuda desproporcional sino que los ingresos públicos son sumamente bajos.
“La deuda equivale a cuatro años de recaudación tributaria, eso nos pone en riesgo y por eso las calificadoras se ponen nerviosas”, afirmó Villarreal.
Ponderó que sin considerar los ingresos que el gobierno federal obtiene por medio del cobro del IVA y del ISR, el espacio fiscal es sumamente reducido mientras que el servicio de la deuda sigue incrementándose.
Villarreal indicó que no estamos al borde a una crisis de fin de sexenio porque el país tiene muchas salvaguardas, pero es urgente actuar con una reforma tributaria que fortalezca los ingresos públicos. Por eso consideró que el paquete debería de hacer un llamado a la sociedad sobre el tipo de sistema fiscal que queremos.
El director del CIEP reiteró que es necesario que se cuente con un consejo fiscal o una oficina parlamentaria de presupuesto integrado tanto por “tirios y troyanos” que no dependa del Ejecutivo que se encargue de hacer proyecciones de media o largo plazo de los pasivos contingentes, como lo proponen organizaciones civiles.
Presupuesto y pobreza. La directora de Gasto Público del CIEP, Sunny Villa, enfatizó que con el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación y los ajustes de 9.2% en desarrollo económico respecto a 2016, va a seguir la desigualdad y afectará el impulso de la economía.
Villa señaló que el proyecto para 2017 plantea un gasto total de 4.8 billones de pesos, equivalente a 23.8% del tamaño de la economía, y trae una disminución real de 1.7% en comparación a 2016. “Si se toman en cuenta que en este ejercicio se han anunciado recortes por 164 mil 77 millones de pesos, el presupuesto para 2017 trae un ascenso de 1.8%”, estimó.
Agregó que las necesidades en materia de salud, no se ven reflejados en al proyecto porque se le castiga con un ajuste neto de 0.85% en términos reales; en tanto que los programas a cargo de la Secretaría de Salud se redujeron a 27 con un presupuesto rasurado en 12.6% sobre lo aprobado para 2016.
En educación se sacrifica 4.8% el gasto, con lo cual, según la especialista, la gran perdedora del paquete económico 2017 es la reforma educativa, al traer una reducción de 30.2% en sus programas insignia.
Sunny Villa expresó que se debe mejorar la planeación del gasto y que el Congreso haga su trabajo.