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La decisión de la Comisión de Cambios de suspender las subastas de dólares vigentes es una manera de “protesta” y “rechazo”, porque el tipo de cambio está desalineado a los valores congruentes con el marco macroeconómico del país, expresó el gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens.
El banquero central dijo que con esta decisión de la Comisión de Cambios, la cual no descarta una intervención discrecional en el mercado cambiario, se busca que sean los fuertes fundamentos de la economía los que anclen el valor de la moneda.
En rueda de prensa conjunta con el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, dijo que la percepción de las autoridades financieras es que el tipo de cambio esta desalineado con respecto a los valores que son congruentes con el marco macroeconómico, y ha habido una sobrerreacción a eventos externos recientes.
Ante ello, argumentó, la Comisión de Cambios –integrada por la Secretaría de Hacienda y el Banxico- decidió suspender de manera inmediata los mecanismos de venta de dólares vigentes, “fue una manera de protesta y que quedará muy claro nuestro rechazo a esos niveles”.
“No es un rechazo gratuito, es un rechazo que está sobre todo fundado en una convicción de fortaleza macroeconómica, que a la vez se refuerza con las acciones que estamos tomando el día de hoy”, dijo respecto al ajuste adicional al gasto público por 132.3 mil millones de pesos y al aumento en la tasas de referencia a 3.75 por ciento, dados a conocer hoy.
Apuntó que tras la decisión de la Comisión de Cambios, el Banxico estará fuera de los mercados cambiarios y solo en condiciones realmente excepcionales haría una intervención discrecional.
Definió como condiciones excepcionales cuando haya nuevamente desviaciones importantes del tipo de cambio que sean por factores temporales y que respondan a una muy baja volatilidad en los mercados.
“Si las desviaciones son persistentes y están respondiendo más que nada a factores fundamentales, procederemos a hacer ajustes, cuando menos a lo que corresponde al Banxico”, agregó.
Respecto a si México usará a Línea de Crédito Flexible con el Fondo Monetario Internacional (FMI), por 65 mil millones de dólares, Carstens aclaró que esos recursos son “una línea de defensa de casi última instancia”.
“Pienso que, dado el nivel de reservas que tenemos, estamos lejos de una circunstancia que nos fuerce a activar ese instrumento”, subrayó.
Sobre la decisión de la Junta de Gobierno del Banxico de incrementar en 50 puntos base la tasa de referencia, para ubicarla en 3.75 por ciento, explicó que es una reacción a la probabilidad de que surjan expectativas de inflación que no estén en línea con el objetivo permanente de 3.0 por ciento.
“Esto no es un inicio de ciclo de alzas de tasas de interés”, aclaró, y con esta acción, se busca alinear las expectativas de inflación y mantenerlas en un curso que sea congruentes con la consolidación de este objetivo de 3.0 por ciento”.
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