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miguel.pallares@eluniversal.com.mx
El efecto del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) aplicado a bebidas saborizadas a partir de 2014 redujo su consumo en 3%, por lo que el mexicano promedio dejó de beber 15 mililitros de estos productos al día, equivalente a un sorbo, indicó un estudio de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL).
“Como medida de política pública dirigida a reducir la ingesta calórica en el país, el IEPS a bebidas saborizadas no funcionó pues, de acuerdo con el estudio, en el mejor de los casos redujo la ingesta promedio en únicamente 0.21% del total del consumo calórico del mexicano”, indicó la investigación titulada La industria de las bebidas no alcohólicas en México.
Los resultados no precisan si la Asociación Nacional Productora de Refrescos y Aguas Carbonatadas (Anprac) patrocinó la investigación, aunque el documento fue compartido por la agencia de relaciones públicas del organismo.
Cabe mencionar que la Anprac ha reconocido el patrocinio a ciertos estudios, sin que en su perspectiva se genere un conflicto de interés.
“El estudio refiere que la Encuesta Mensual de la Industria Manufacturera (EMIM) del Inegi estima que el consumo medio de refrescos por persona en los últimos años fluctúa entre 350 y 500 mililitros diarios, el equivalente a tan solo 5% y 7% de la ingesta calórica diaria del mexicano”, dijo.
De acuerdo con el comunicado, el Centro de Investigaciones Económicas (CIE) de la UANL sostiene que es imposible atribuir al consumo de refrescos como la causa principal del sobrepeso y la obesidad en el país, ya que la dieta del mexicano común excede la recomendación de la OMS, que asciende a poco más de 3 mil kilocalorías.
“La evidencia disponible hasta hoy sugiere que, al menos en términos costo-beneficio, la medida impositiva afecta más de lo que beneficia. La aplicación del impuesto no sólo no funciona para reducir el consumo calórico diario del mexicano, sino que resulta una medida regresiva”, indica.
El impuesto, agrega, tuvo un efecto sobre la economía en general y en el escenario más conservador estima que la producción bruta del país cayó en 6 mil 454 millones de pesos, equivalente al 0.04% del Producto Interno Bruto (PIB), por lo que este gravamen ocasionó la pérdida de poco más de 10 mil puestos de trabajo.
Importante industria. Sobre la importancia de los industriales del sector de bebidas no alcohólicas, los investigadores de la UANL concluyen que los refresqueros tienen una importante relación con otros sectores a nivel nacional, además de tener un peso sustancial en la compra de insumos intermedios.
“La industria de las bebidas no alcohólicas representa un 0.61% del PIB en forma directa y un 0.46% en forma indirecta, por lo tanto, se puede calcular que esta industria contribuye con casi 1.1% de la producción bruta del país en un sentido amplio. Además, este sector brinda empleo directo a más de 100 mil personas”, apuntó.
El estudio concluye que existen otros factores que contribuyen a la obesidad, como una reducción en las horas de sueño, cambios en la temperatura ambiente (por el uso de aires acondicionados), un mayor uso de medicamentos como antidepresivos, entre otras.