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maria.saldana@eluniversal.com.mx
La industria maquiladora del país mejora su competitividad al registrarse una paridad cambiaria de casi 19 pesos por dólar, pero han subido los costos de importación de los insumos y sus clientes piden un ajuste en precios, advirtieron integrantes del Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación (Index).
El nuevo presidente del organismo, Federico Serrano, dijo que la industria del ensamble elabora sus proyecciones anuales en dólares, porque la mayor parte de sus costos está en esa divisa, pero hay gastos en pesos como los salarios y pago de servicios, entre otros factores.
“Aumenta la competitividad y por eso estamos apostándole a aumentar el contenido nacional, para bajar gradualmente el porcentaje de importación, porque algunos insumos los estamos pagando en dólares”, dijo Serrano tras su toma de posesión.
En tanto, el consejero nacional y expresidente de dicho organismo, César Castro, dijo que los clientes en Estados Unidos envían dólares para pagar los contratos a las maquiladoras mexicanas, pero desde que se fortaleció el dólar han pedido renegociar los contratos a fin de que los mexicanos den precios más accesibles.
A mediados de 2015, cuando se empezó a depreciar el peso, los clientes de las maquiladoras del sector electrónico comenzaron a pedir la revisión de los términos contractuales.
Aseveró que México se vuelve más atractivo para los inversionistas y para los clientes, quienes ven mejores costos de maquilar sus productos en el territorio mexicano.
Por ejemplo, dijo, en Laredo, Texas, se paga una hora de trabajo en 10 dólares, mientras que en México una maquiladora cotiza entre 120 y 150 pesos por día, lo que hace más atractiva a la mano de obra nacional.
El sustituto de Emilio Cadena comentó que para contrarrestar el efecto buscarán integrar un mayor contenido nacional.
Durante la toma de protesta, el subsecretario de Industria y Comercio de la Secretaría de Economía, Rogelio Garza Garza, dijo que la industria entra a la nueva era de la manufactura 4.0, es decir la revolución por la cual se automatizan más los procesos de producción, lo que tiene un impacto en el número de empleos.
Para el funcionario, el tipo de cambio no ha tenido efectos importantes en los costos de fabricación porque la disminución de tarifas eléctricas que se dio el año pasado permite a las empresas absorber el aumento del dólar frente al peso. Sin embargo, dijo que en algunos casos hay industrias que importan insumos y que pudieran tener una afectación.
“Estamos enfrentando momentos difíciles a nivel mundial, lo que pega a todas las economías y tiene un impacto financiero fuerte. México ha hecho una labor grande al tener controlados sus indicadores macroeconómicos, además de que el peso se deprecia mucho menos que otras monedas. Tenemos un país sólido y lo que se debe hacer es apostarle a la manufactura más automatizada y con mayor tecnología”, recalcó.