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Tras el buen dato del tercer trimestre, analistas consultados por el Banco de México ajustaron a la alza las expectativas de crecimiento de la economía para este año de 2.29% a 2.44%, mejoraron la percepción del entorno económico, mientras continuó el descenso para la inflación.
Sin embargo, este optimismo no contagió a las previsiones para 2016, ya que redujeron ligeramente de 2.79% a 2.74% el pronóstico de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).
Lo anterior debido a que sigue preocupando la debilidad del mercado externo y la economía mundial, como principal obstáculo para el crecimiento, seguido de la inestabilidad financiera internacional y los problemas de inseguridad pública. Además, apareció como un nuevo factor limitante la inestabilidad política a nivel global, a raíz de los recientes atentados terroristas perpetrados en París, Francia.
En la parte interna, los expertos consultados consideraron que permanece como freno la plataforma de producción petrolera, también el precio del petróleo, la política fiscal que se está instrumentando, además de la debilidad del mercado doméstico.
No obstante, en el clima de negocios se volvió a asomar el sol, ya que subió de 31% a 37%, la proporción de analistas que aseguran que mejorará en los próximos seis meses, y seis de cada 10 afirman que la economía está mejor que hace un año. En la encuesta anterior, esta proporción era de cuatro de cada 10, de manera que se redujo de 53% a 33% el grupo de quienes manifestaban un panorama desfavorable.
De la coyuntura para realizar inversiones, 50% de los participantes consideró que es un buen momento, frente a 42% que no está seguro.
De esta forma, incrementó de 24 mil 834 millones a 25 mil 179 millones de dólares la estimación para la inversión extranjera que podría recibir México al cierre del año; por el contrario, bajó de 28 mil 695 millones de dólares a 28 mil 576 millones de dólares los flujos esperados para 2016.
En materia cambiaria bajaron las presiones para el peso frente al dólar al estimar una paridad de 16.70 pesos por billete verde para el cierre de 2015, es decir, 5 centavos menos a los calculados en la encuesta. Sin embargo, para 2016 los expertos del sector privado están previendo un tipo de cambio mayor, al pasar su proyección de 16.55 a 16.68 pesos por dólar.
En lo que respecta al objetivo del Banco de México para la tasa de fondeo interbancario, se aprecia que para el cuarto trimestre de 2015 y los dos primeros trimestres de 2016 la mayoría de los analistas anticipa un nivel por encima de la tasa objetivo actual.
En el terreno inflacionario, los analistas mejoraron sus expectativas de cierre de 2015, con una previsión que de 2.66% se redujo a 2.40%. Lo mismo se ocurrió para 2016, que se ubicó de 3.44% a 3.34%.
Los analistas consultados por el Banco de México también anticipan que en noviembre los precios al consumidor se incrementarán en 0.65%, cuando en la consulta de octubre registraban un nivel de 0.86%.
