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Los cambios que solicitó el sector empresarial al esquema fiscal para 2016 se atendieron parcialmente en la Ley de Ingresos que aprobaron los diputados, y por ello los líderes de la iniciativa privada advirtieron que negociarán con el Senado las peticiones pendientes.

Las modificaciones fiscales aprobadas por los diputados fueron “insuficientes”, dijo en entrevista, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de la ciudad de México (Canaco), Humberto Lozano, por lo que “estamos satisfechos a medias” al desecharse propuestas como la deducibilidad en el consumo de restaurantes y en prestaciones salariales, y se mantuvo la retención del ISR sobre intereses.

También quedaron fuera otras solicitudes como la deducibilidad de los gastos pre-operativos en proyectos mineros, deducción de inversiones en maquinaria y equipo para el transporte, temas de las Asociaciones Público Privadas, entre otros puntos “que se continuarán negociando con el Senado de la República”, dijo a su vez el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Manuel Herrera Vega.

Lozano, Herrera y el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Gerardo Gutiérrez Candiani, reconocieron sin embargo que los diputados escucharon algunos de sus planteamientos al aprobar la iniciativa de Ley de Ingresos para el ejercicio fiscal 2016.

Como por ejemplo, se amplió el beneficio de la deducibilidad inmediata de las inversiones para las empresas que tienen ventas anuales de hasta 100 millones de pesos, el doble de la cantidad que propuso inicialmente el gobierno federal.

También se consideró mantener un ISR de 28% para la repatriación de capitales y proteger los datos de aquellas personas que regresarán su capital al país durante tres años, y la disminución de IEPS para las bebidas carbonatadas.

Una muestra de que dio frutos el diálogo entre el gobierno y el sector empresarial fue el incremento de la deducibilidad por la adquisición de automóviles al subir el tope de 130 mil a 175 mil pesos, dijo Herrera Vega.

Lozano agregó que no hay autos en México que se produzcan por 130 mil pesos, y añadió que con ello las empresas ayudan a sus empleados a tener automóviles de modelos más recientes.

Gutiérrez Candiani expuso que es necesario “insistir en que se requiere prudencia para afianzar la estabilidad macroeconómica ante el entorno de inestabilidad internacional. Lo que implica agotar todas las alternativas viables para mejorar nuestro mercado interno”, dijo el líder del sector privado.

Aseveró que “la consigna es que los acuerdos den cauce a un verdadero ajuste y énfasis en la eficiencia en la asignación de los recursos, con los principios de transparencia y comparar objetivos con resultados”.

Expuso que a pesar de los compromisos y obligaciones inamovibles se tiene que registrar un precedente y hacer un verdadero esfuerzo de reingeniería del gasto o presupuesto base cero en la próxima discusión del presupuesto de egresos de la federación del 2016.

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