El periodo de volatilidad bursátil global hace improbable que la Reserva Federal eleve la tasa de fondos federales en su reunión de septiembre, aunque es posible un incremento antes que finalice el 2015, opinaron hoy economistas estadunidenses.
El progreso alcanzado en el mercado laboral estadunidense, que ha creado en promedio más de 200 mil empleos mensuales en el último año y reducido la tasa de desempleo a 5.3 por ciento, tampoco justifica el riesgo que podría tener un incremento de las tasas en los mercados, señalaron.
“Por la turbulencia y la volatilidad en los mercados y el hecho de que las expectativas de un aumento de la Reserva Federal en septiembre son bajas, dudaría en elevarlas este mes por la situación de los mercados y de China” , señaló el ex vicepresidente de la Junta de Gobernadores de la Fed, Donald Kohn.
Kohn, considerado un moderado en política monetaria, sostuvo sin embargo que la Reserva Federal (Fed) debe mantener como su política la declaración de que habrá un incremento en la tasa de fondo federales “más adelante este mismo año” .
El Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal (FOMC) se reunirá en Washington del 15 al 16 de septiembre, en medio de señales encontradas de miembros de la Fed sobre la conveniencia de elevar las tasas este mes o posponer el aumento para otro momento en 2015.
La tasa de fondos federales, que opera como referente de las tasas de interés comerciales, se ha mantenido en su nivel de banda variable de 0.0 a 0.25 por ciento durante los últimos cinco años.
“La Fed ha cultivado está recuperación tan cuidadosamente, con tan enorme esfuerzo durante los últimos siete años ¿van a arriesgarse en este ambiente, con mercados financieros inestables?” , cuestionó por su parte Julia Coronado, economista en jefe de Graham Capital Managment.
Coronado sostuvo que en el improbable que la Fed incremente las tasas de septiembre, enviarían la señal que nos les preocupan tanto ni la volatilidad global ni el nivel inflacionario, sino que están sopesando en mayor grado el estado del mercado laboral en Estados Unidos.
La economía estadunidense generó 215 mil empleos no agrícolas en julio. El Departamento de Trabajo divulgará mañana viernes las cifras para agosto.
Coronado coincidido con Kohn en el sentido de que la Fed debe tomar en cuenta el panorama de los mercados emergentes, en especial de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) .
“Al menos tres están en una recesión (...) ese fue el catalizador macroeconómico de la volatilidad” , dijo Coronado.
Kohn estimó que la probabilidad de una alza de las tasas de interés es mayor al 20 por ciento, pero menor al 50 por ciento, Coronado ubicó la probabilidad en 10 a 15 por ciento, de manera respectiva.
Apenas la semana pasada el presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, William Dudley, sostuvo que la decisión para subir las tasas de interés durante la reunión del FOMC en septiembre era “menos convincente” que hace unas semanas.
Pero unos días después, el vicepresidente de la Reserva Federal, Stanley Fischer, dijo que el banco central debe mantener su plan de elevar las tasas basado en su confianza de que la inflación repuntará a un nivel más sano conforme sigue creciendo la economía estadunidense.
tcm
Estados Unidos creció a un ritmo anualizado de 3.7 por ciento en el segundo trimestre de 2015, un aumento frente a la estimación original de 2.3 por ciento.
Joseph Gagnon, del Instituto Petersen de Economía Internacional, consideró que la FED debe asimismo considerar el hecho de que el dólar estadunidense se ha apreciado 2.0 por ciento desde la última reunión.
“Eso no es trivial. Es un lastre en las exportaciones, que es el principal factor que nos está desacelerando (...) Por todas estas razones me parece que es mejor esperar (a un alza en las tasas)” , dijo en un foro de la Institución Brookings.
John Faust, economista de la Universidad de John Hopkins, señaló que la normalización de la política monetaria depende precisamente menos de la situación actual de los mercados, la inflación o el desempleo, sino de la expectativa de la FED para los siguientes años.
Al respecto señaló que el bajo nivel inflacionario que experimenta Estados Unidos no debe ser una preocupación para el banco central debido a que se trata de la consecuencia natural de una baja en el precio de los energéticos.
“Eso no debe afectar tu confianza del nivel donde estará la inflación en los próximos tres o cuatro años” , indicó Faust.