Economía

Crisis de Brasil detonará fuga de capitales en emergentes

Colapsa su moneda y se deprecia 9.1% en las últimas cinco sesiones; AL es la región más expuesta a la salida de recursos, dicen analistas

La séptima economía mundial sufrió una degradación de Standard & Poor’s por no mantener controladas sus finanzas (ARCHIVO EL UNIVERSAL)
23/09/2015 |23:44
Tláloc Puga
Coeditor de la sección CarteraVer perfil

cartera@eluniversal.com.mx

La crisis que atraviesa Brasil, la economía más grande de América Latina y la séptima del mundo, puede detonar inmediatamente la salida de recursos en los mercados financieros de la región, entre ellos los mexicanos, coincidieron analistas.

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La nación sudamericana entró este año en recesión económica y el pasado 9 de septiembre, la agencia Standard & Poor's degradó su deuda soberana a la categoría de basura, debido a la incapacidad del gobierno de mantener sus finanzas bajo control.

Anteriormente, el 11 de agosto, la calificadora Moody’s ya había recortado la nota de Brasil y la dejó a un escalón de la categoría de basura.

“La pérdida en el grado de inversión en Brasil puede contagiar de manera inmediata una salida de recursos y volatilidad en los mercados financieros de toda la región de América Latina y otros mercados emergentes”, opinó en su momento Carlos Ponce, director ejecutivo de análisis y estrategia de Grupo Financiero BX+.

Desde antes de los downgrades, la moneda brasileña viene colapsando frente al dólar. Al cierre de agosto de 2014 cotizaba en 2.24 reales por billete verde y ayer acabó en su peor nivel en la historia, de 4.18 unidades, para acumular la friolera depreciación de 86.9% en ese lapso.

Tan sólo en las últimas cinco jornadas, el real acumuló una pérdida de 9.1%, empeorando la crisis.

“Definitivamente, la crisis que está sufriendo la economía de Brasil está motivando de manera inmediata una salida de recursos y volatilidad en los mercados financieros emergentes”, opinó Alfredo Coutiño, director para América Latina de Moody’s Analytics.

Enfatizó que países emergentes están sufriendo una reversión de flujos de capital de corto plazo, ante el inminente ciclo alcista de tasas de interés en Estados Unidos y el incremento en los riesgos, sobre todo en Brasil, donde hay un clima político-social efervescente.

“La manera tan dramática que está cayendo Brasil despierta alarmas y pone nerviosos a los inversionistas, puesto que eleva las posibilidades de que empeoren las cosas en el resto de América Latina”, añadió.

Para Cesar Elías, analista de Multiva, la crisis del real brasileño y los descensos de los precios del petróleo llevaron al peso mexicano de nuevo arriba de 17 por dólar al mayoreo, que finalizó ayer en 17.13 unidades, según datos de Banxico.

Al menudeo, el billete verde ha repuntado 45 centavos durante el último par de días, para finalizar en 17.40 pesos en ventanillas de Banamex, y se quedó a sólo 10 centavos de igualar el precio más caro de la historia, registrado el 25 de agosto.

El reciente comportamiento de la moneda sudamericana obedeció a que Brasil fue significativamente impactado por la debilidad del sector manufacturero de China, que a su vez augura un débil crecimiento del gigante asiático, expuso Elías.

Caixin informó la noche del martes que el índice preliminar de gerentes de compras del sector manufacturero de China cayó a 47 puntos en septiembre, su peor nivel desde marzo de 2009, y además estuvo por debajo de las previsiones del mercado, de 47.5 unidades.

Sin embargo, Elías destacó que es más grave la crisis interna de Brasil, puesto que las dudas respecto a la situación fiscal continúan pesando sobre los inversionistas, lo que se convierte en el mayor factor de desestabilización de la moneda.

Ante el colapso de Brasil, su banco central intervino ayer en el mercado. al anunciar subastas extraordinarias para vender swaps cambiarios (seguros ante posibles subidas de tasas de interés) y dólares. La institución venderá hasta 20 mil swaps y derivados, así como hasta 2 mil millones de dólares al contado con acuerdos de recompra establecidos el 5 de julio y 2 de septiembre de 2016.