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sara.cantera@eluniversal.com.mx
Aguascalientes.—La depreciación del peso frente al dólar encareció insumos básicos para los constructores como el acero, además de los servicios de mantenimiento y maquinaria, mencionó Gustavo Arballo, quien es el titular de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).
Entrevistado durante la Reunión Nacional de Infraestructura Hidráulica, Arballo comentó que los constructores trabajan con precios de hace cuatro o cinco años, debido a la competencia por ganar contratos de obra y licitaciones, que los obliga a presentar posturas muy bajas que no le permiten desarrollarse a las empresas, ni reponer su equipo.
“Hay insumos donde está repercutiendo la paridad del peso dólar, entonces nos va a alcanzar para menos (...) el acero debería incluso bajar de precio porque han bajado las tarifas eléctricas, pero depende de insumos internacionales que se cotizan en dólares y hay muchas otras cosas que tienen contenido de acero”, detalló.
En el caso de las refacciones, servicio y maquinaria, al igual que el producido en México, se cotizan en dólares pues mucho equipo es importado.
Respecto al recorte presupuestal y su posible impacto en proyectos de infraestructura, Arballo resaltó que el gobierno debería concentrarse en disminuir el gasto corriente y equilibrar el número de proyectos que se harán bajo esquemas de Asociación Público Privada (APP), para no descuidar la inversión pública.
“El gobierno a través de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes debe tener un equilibrio, no todas las obras deben ser APPs. Aunque haya recortes debe seguir la inversión en obras públicas”, refirió el presidente de la CMIC.
Para tener oportunidad de participar en un mayor número de obras a través de esquemas de APP, la Cámara reconoció que los constructores deben cambiar su mentalidad y aprender a conseguir recursos, saber armar paquetes, además de asociarse con otras empresas para disminuir el riesgo de la inversión y recurrir a fuentes de financiamiento como son los fondos de inversión.
“Debe haber un esquema para que el dinero pueda llegar a donde sea necesario, las APPs no han funcionado como estaban planeadas sino con una lentitud impresionante y tiene que ver con la disposición de las dependencias de gobierno, aunque la nueva ley ahora prevé proyectos no solicitados, donde nosotros demostrando el costo beneficio pudiéramos generar esos proyectos”, explicó Gustavo Arballo.
La CMIC representa a 10 mil afiliados y considera que en los próximos años se abrirán muchas oportunidades para invertir en infraestructura, sobre todo en proyectos de energía y para concretar el Programa Nacional de Infraestructura, del cual se ha ejercido menos de 30% de 7.7 billones de pesos presupuestados hasta 2018.