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El escenario económico para México puede ser todavía más complicado en lo que resta del año y durante 2016, debido a una nueva caída en los precios del petróleo.
El Departamento de Energía de Estados Unidos anticipó un ajuste a la baja en los petroprecios de los crudos marcadores que son tomados como referencia en países productores como México, de 5.89 dólares por barril en promedio para el aceite norteamericano WTI y el Brent del Mar del Norte, para lo que resta de 2015.
En su más reciente informe Short-Term Energy Outlook , del 11 de agosto, el organismo plantea que los precios de estos dos aceites serán 7.62 dólares inferiores en 2016, respecto de las estimaciones de hace un mes.
Las previsiones de la Energy Information Administration (EIA, por su sigla en inglés, organismo encargado de las estadísticas y análisis oficiales del Departamento de Energía de Estados Unidos) refieren que en julio se tenía una previsión de cerrar el año con un precio promedio para el WTI de 55.51 dólares por barril, mientras que el Brent se situaría en 60.22 dólares.
En ese mes se pensaba que los petroprecios alcanzarían los niveles de 62.04 y 67.04 dólares por barril para estos mismo tipos de crudo.
No obstante, las condiciones del mercado, factores geopolíticos y económicos mundiales obligaron a los especialistas de sector energético norteamericano a ajustar, un mes después, sus previsiones a la baja.
Ahora esperan un cierre de año con precios para el WTI de 49.62 dólares y de 54.40 para el Brent del Norte.
En consecuencia, bajaron las expectativas para 2016, al colocar el valor del crudo norteamericano en 54.42 dólares y de 59.52 para el Brent.
El escenario poco favorable para los países productores, y en especial para las economías que dependen de su industria petrolera, “son el reflejo de las preocupaciones sobre un menor crecimiento económico en los mercados emergentes, que afectaría la demanda; la problemática situación de China y su consecuente desaceleración; las expectativas de que se reanuden las exportaciones de petróleo de Irán, tras el levantamiento de las sanciones en materia nuclear, y el aumento en los inventarios de crudo a nivel mundial”, explicaron los analistas del Departamento de Energía de EU.
Con estos nuevos escenarios de precios, es posible esperar que el crudo mexicano se situé entre 45 o 46 dólares en promedio este año, y entre 49 y 50 dólares para 2016, considerando que el petróleo nacional mantiene sistemáticamente un diferencial de casi dos dólares con el norteamericano.
Los ajustes a las previsiones suponen que niveles esperados de precio del crudo mexicano en sus tipos Istmo, Maya y Olmeca serían arrastrados en ese declive, de tal suerte que se estarían colocando por debajo de 50 dólares contemplados en los pre Criterios de Política Económica para 2015, que Hacienda dio a conocer cuando presentó los recortes al gasto. A esta situación se suma la preocupante caída de la producción de petróleo crudo en el país.
De acuerdo con los reportes operativos semanales de Pemex Exploración y Producción (PEP), entre el 1 de enero y 8 de agosto de 2015, el nivel de extracción promedio se situó en dos millones 264 mil barriles diarios, 6.7% por debajo de lo observado en 2014.
Según analistas, varios factores contribuyen a estos bajos niveles de producción, aunque el más el representativo es la declinación natural de los yacimientos, de los cuales, entre ellos Cantarell, han alcanzado un nivel de madurez que ya no permite los mismos registros que hace 10 o 20 años.
