El recorte al presupuesto de Petróleos Mexicanos (Pemex) para este año pegará a la estrategia nacional de aumentar la producción de gas natural del país y a la intención de disminuir las importaciones del hidrocarburo.
La empresa petrolera y el gobierno federal apostaban a que, mediante el proyecto gasífero Lakach, el principal campo que se desarrollará en aguas profundas en México, lograrían el objetivo de incrementar la oferta de este insumo; sin embargo, esto no sucederá, al menos en los próximos dos años, pues la entrada en operación de este campo se pospondrá para 2017, de acuerdo con fuentes de Pemex.
Esta no es la primera vez que se aplaza la puesta en marcha del campo. En 2013, Lakach ya había sufrido un primer desfase, pues se esperaba que comenzara a producir en ese año; no obstante, por problemas en la perforación del pozo delimitador y de la información obtenida del mismo fue necesario ajustar el programa para el primer trimestre de 2015. Ahora, con el ajuste presupuestal por 62 mil millones de pesos para este año en Pemex, la operación del campo gasífero tendrá que recorrerse para 2017.
Este proyecto se presentó como una opción viable para contribuir a incrementar la oferta de gas, ya que podría proporcionar hasta 400 millones de pies cúbicos diarios en su producción máxima al mercado nacional.
Como consecuencia de los recortes presupuestales a Pemex, las inversiones que se tenían estimadas para Lakach disminuirán 42%, es decir, una inyección de capital menos por 2 mil 278 millones de pesos.
Según analistas del sector energético, esta menor producción no sólo del petróleo, sino también del gas, confirma los riesgos que enfrenta el crecimiento de la economía nacional.
La especialista del banco Ve por Más, Dolores Ramón, consideró que el diferimiento de proyectos como Lakach tendrá un impacto en el comportamiento de toda la cadena productiva asociada al campo, lo que va desde la derrama económica que supone entre proveedores y contratistas hasta las perspectivas de que el país aumente la producción de gas.
La calificadora estadounidense Moody’s advirtió que los recortes presupuestales que tuvo que realizar el gobierno este año llevarán a una aceleración en la caída en los pozos petroleros en algunas regiones.
De acuerdo con un estudio de la agencia internacional, la reducción en el nivel de producción tendrá un impacto negativo que puede afectar las notas crediticias de algunos estados.
Además, los recortes en la producción petrolera por limitaciones presupuestales aumentan la posibilidad de que se utilice el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas.
