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El Servicio de Administración Tributaria (SAT) debe adoptar las mejores prácticas administrativas y evitar que el acercamiento con el contribuyente no constituya una amenaza o intimidación para éste, exhortó la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon).
De acuerdo con un comunicado de la dependencia, el fisco mexicano aplica una serie de malas prácticas contra los contribuyentes en materia de recaudación persuasiva.
La semana pasada, EL UNIVERSAL publicó que el SAT logró una recaudación de 4 mil millones de pesos por prácticas de persuasión que utilizó sobre los contribuyentes. Entre las medidas que aplicó el órgano recaudador del país es la solicitud del pago de impuestos a través de cartas correos electrónicos, telemensajes, mensajes SMS y requerimientos de las entidades federativas, que es por donde obtuvo esos recursos.
Para la autoridad fiscal, las plataformas electrónicas se convirtieron en la herramienta recaudadora más importante en los últimos años.
Sin embargo, dentro de estas facultades del SAT la Prodecon detectó 10 malas prácticas:
1.- Citar en sus oficinas al contribuyente, incluso por teléfono, para que aclare "inconsistencias" respecto de uno o más ejercicios, usando como fundamento expresiones abstractas y genéricas, como que se detectaron "comportamientos atípicos".
2.- Comunicar al contribuyente en esas citas, únicamente de manera verbal, las presuntas irregularidades.
3.- Presionar al contribuyente a firmar una declaración en la que se compromete a autocorregirse.
4.- Impedir el acceso a los asesores del contribuyente cuando es citado en las oficinas de las autoridades.
5.- Citar preceptos legales que contemplan procedimientos que no se llevan a cabo.
Ejemplo: en las cartas invitación por depósitos en efectivo se cita el fundamento legal de la discrepancia fiscal, sin que la autoridad haya llevado a cabo dicho procedimiento.
6.- No exponerle al contribuyente en forma comprensible cómo puede aclarar su situación.
7.- Señalar a su arbitrio el plazo perentorio para atender la "invitación".
8.- Solicitar copiosa información y documentación fuera de facultades de fiscalización.
9.- Adjuntar a dichas solicitudes formatos no oficiales diseñados por la propia autoridad, trasladando prácticamente al contribuyente la carga de auto auditarse.
10.- Notificar propuestas de pago a los contribuyentes sin precisarles las causas y el método por el que se determinaron.
La Prodecon informó que en breve emitirá un análisis sistémico para sugerir a las autoridades que adopten un protocolo que norme los procedimientos de cobro persuasivo que lleva a cabo.
Asimismo, anunció que convocará a una reunión periódica con autoridades fiscales y los grupos de contribuyentes organizados.
tcm
