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Posiblemente al igual que usted, yo ni estoy, ni estaba, en contra de los foros de pacificación. Todo lo contrario. Dije que era una muy buena idea realizar esos foros. Pero este ejercicio me ha provocado tantas preguntas que tengo la impresión de que se trata de una fachada. De algo imaginario. Le explico a continuación.
La “primera versión de la agenda” (p.3) se presenta en el documento titulado “Aportaciones de los Foros Escucha para construir la agenda de políticas de estado para la construcción de la paz entre todos”. Este documento fue presentado el pasado 24 de octubre. Usted mismo puede leer ese documento en la siguiente página: https://t.co/RQdkwR0flj. De la lectura, usted terminará haciéndose la misma pregunta central que yo: ¿se tratará de una fachada más de participación social, igual a la de los sexenios precedentes?
Más en detalle, después de que lo lea, le quedará la clara necesidad de preguntarse si tales “eventos de escucha” (p. 3), en donde supuestamente se recibieron las “...percepciones y opiniones...” (p. 4), que según los redactores del documento “...no son datos objetivos de la realidad…” (p. 4), en realidad están sirviendo para justificar una política de seguridad ya decidida anteriormente. Se preguntará: ¿no es este documento un ideario partidista, un pegoste, por cierto muy mal hecho, de lo que dicen unos, con lo que ya está decidido que van a hacer otros?
¿Por qué la pregunta? Solo por lo siguiente: porque los “dos tipos de políticas necesarias” (p. 26) ya están definidas, el “Esquema de la Agenda de políticas de estado de construcción de paz” (p.27) también, al igual que las “Políticas integrales y dependencias participantes” (p. 28), las “Políticas integrales de Apoyo a grupos específicos” y sus “Planteamientos de políticas a seguir” (pp. 30 a 46). ¿Realmente todo ese nivel de detalle lo produjeron estos foros de “escucha social”? ¿Y por qué las “Contribuciones sectoriales al proceso de pacificación y reconciliación” (p. 131), ya con las acciones, estrategias definidas y resultados esperados, sólo consideran a las secretarías de Cultura, Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y del Trabajo y Previsión Social (STPS)? ¿No será que ya estaban planeadas y se buscó incluirlas a esta primera versión de la agenda? Bueno, mire, y es que el nivel de detalle de las acciones a seguir es simplemente sorprendente. Ya se saben las formas en que se llevará la “relación bilateral con EUA” (pp. 80 y 81) y con “Centroamérica” (pp. 81).
Es simplemente imposible no hacerse estas preguntas. Perdón por repetir, pero ¿quién no va a hacerse estas preguntas con pifias como esta que se presentan desde la introducción del documento?: que las “percepciones y opiniones, no son datos objetivos de la realidad… en ello está su importancia...nos dan orientaciones y criterios…” (p. 4).
Pues dígale esto a las víctimas: que los testimonios en las carpetas de investigación por homicidios, o secuestros, o extorsiones, no son datos objetivos de la realidad. Que viven en un mundo de percepción. ¿Pues no será entonces que los foros también fueron imaginarios? Ya lo dirá el tiempo. Pero dudo que el programa de seguridad final difiera mucho de este documento, el cual es, aparentemente, sólo una primera versión.
Investigador y Miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI-3). Centro de Investigación en Ciencias de Información Geoespacial (CentroGeo).
Twitter: @cjvilalta