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A cuatro años del lanzamiento del CX-5, Mazda realiza una renovación estética del exterior e interior de este SUV para modernizarlo y, con ello, hacer más competida la pelea en el segmento donde encontramos una larga lista de contendientes como; Honda CR-V, Hyundai Tucson, Kia Sportage, Ford Escape, Chevrolet Equinox, Toyota RAV4, Nissan XTrail y Jeep Cherokee.
Cirugía Mayor . Parte de la transformación d el CX-5, que llegará al mercado mexicano el próximo año como modelo 2018, se ve en el evolucionado el lenguaje de diseño Kodo-Soul of Motion, principalmente en la parte frontal.
Esta vez el SUV obtiene un porte más agresivo y aerodinámico por medio de una parrilla de panal más grande, unos faros más delgados y fascias más prominentes.
A diferencia de la mayoría de las renovaciones de media generación o facelifts, en donde únicamente se transforman los grupos ópticos y la parrilla, en el nuevo CX-5 se va más allá. Además de los cambios en la zona frontal, la altura del vehículo fue rebajada para disminuir el centro de gravedad y lograr una mayor estabilidad y mejores sensaciones de manejo, de igual forma la carrocería se ensanchó un centímetro y los pilares A fueron reubicados 3.5 centímetros hacia atrás en comparación con el modelo anterior.
Además del trabajo realizado en la carrocería, el interior del CX-5 también fue rediseñado. Ahora podemos ver un tablero, consola central, paneles de las puertas, el volante, la palanca de velocidades y las salidas del aire acondicionado con una nueva imagen más moderna. Asimismo, destaca la pantalla del sistema de información y entretenimiento que fue reubicada a la parte superior del tablero, además de la reclinación en el respaldo de la fila trasera que también fue agregada.
Sin cambios. La capacidad de la zona de carga no tuvo modificaciones, es decir se mantiene con el volumen de 500 litros, mientras que en el tren motor tampoco fue actualizado, por lo que tanto el sistema de suspensión, el cuatro cilindros de 2.0 o 2.5 litros de 155 hp y 186 hp respectivamente, así como la transmisión automática de seis velocidades y la dirección eléctrica se mantienen igual que el antecesor.
