Hace ocho años, Mastretta plasmó el nombre de México en la industria automotriz mundial cuando presentó, en el Auto Show de Londres, el deportivo ligero MXT. Mientras eso sucedía, Álvaro Gutiérrez cocinaba uno de los proyectos más ambiciosos dentro del mundo motor: el Inferno Exotic Car.
Este auto se perfiló desde ese entonces para dar un nuevo salto en la historia automotriz nacional, al incursionar en el segmento de los Hypercars, un ramo completamente desconocido para la industria motor mexicana.
A este proyecto se le sumaron nombres importantes como el del diseñador italiano Antonio Ferraioli, quien ha participado en trabajos como el Lamborghini Aventador SV, el Asterion y el Veneno. Otro nombre es el del investigador mexicano Said Robles, que aportó su talento con el Metal Foam (una aleación de aluminio, plata y zinc) para construir carrocerías mucho más ligeras y resistentes.
Hoy, a casi un año de que fue mostrado el primer prototipo Inferno en la Ciudad de México, Manuel Llaguno, responsable de nuevos negocios de la marca, platica que este súperauto de iniciativa mexicana alista maletas para mudarse a Estados Unidos y dar empuje a su arranque de producción.
“Hemos optado por abrir las puertas a diversas opciones de negocios, tanto para inversionistas como distribuidores y afortunadamente hemos tenido mucha fuerza en Estados Unidos y en otros países; esa es la razón por la que el proyecto está por partir para allá”
Manuel cuenta que el auto ya está en la etapa final del desarrollo y que van al país norteamericano con la planeación de un último prototipo, el cual se mostrará cuando se haga el anuncio del inicio de producción, que esperan realizar entre el mes de septiembre y octubre de este mismo año.
“Lo que estamos por incluir en estos dos meses, está en el tema de tecnologías para la parte interior, aunada con la del motor. Queremos que el auto cuente con las mejores tecnologías que hay en el mercado. En este momento, tratamos con diversas marcas las opciones para temas como el infoentretenimiento, donde pensamos incluir tecnología muy sofisticada, que incluso no existe en un hypercar”.
En cuanto al corazón de esta bestia, dice que la licitación que se tenía con tres empresas ya se redujo a dos y están por definir el motor. “Eso también se dará a conocer cuando demos la fecha de producción, así como la aprobación final del vehículo. Por lo pronto, diré que a esos mil 400 caballos de fuerza que dijimos antes, les podemos dar una sorpresa adicional”.
Apunta que, con el segundo prototipo, se esperan tener todas las características necesarias para hacer las pruebas que se requieren y comenta que, por lo pronto, el auto ya cuenta con solicitudes de cupos. “El número de pedidos se dará a conocer en el mismo evento de anuncio de producción, junto con la fecha de entrega de las primeras unidades”.
Estados Unidos será el principal mercado para el Inferno, donde prácticamente será destinado el 50% de la producción. También están los Emiratos Árabes, otros países europeos y por supuesto, México.
En relación al evento de lanzamiento, indica que para este segundo prototipo se están analizando diversos Auto Shows de renombre.
Criticas y felicitaciones.
En cuanto al apoyo recibido en México, indica que mucha gente ha creído en el proyecto, al igual que en Estados Unidos, donde les han abierto las puertas. “Hemos tenido muchos comentarios y la gente ya lo está esperando. Con el Inferno hemos roto los esquemas de diseño y movimos la industria a un nivel mundial, pues es algo muy diferente y que nos hace únicos. Por la innovación, algunos han quedado encantados y a otros no pero esa es la idea; es un auto único que no se parece a ningún otro en el mundo”. Adicional a esto, cuenta que este nuevo hypercar es tan solo la primera propuesta, pues ya tienen tres diseños adicionales con un estilo más conservador; además de la sorpresa de una hipercamioneta que ya ha sido mencionada en otras ocasiones.
Lo que resulta más interesante de este plan es que se planea hacer una edición del Inferno con motor eléctrico, del cual ya hay pláticas para hacer esta opción toda una realidad.
Cuestionado sobre la razón de su cambio de residencia, Manuel indica: “estamos muy agradecidos con México pero desafortunadamente no hubo el compromiso de muchas inversiones. Eso es algo que sabemos y después nos va a beneficiar, no solo a nosotros sino a toda la industria del país”.
Uno de los puntos importantes en esta nueva etapa del Inferno es la distribución, de la cual ya se tienen alternativas en Estados Unidos, México, Latinoamérica y Europa, aunque admite que es muy probable que la primera sea en el país norteamericano.