Más Información
VIDEO: “Era un líder respetado y amado por sus seguidores”; Madre buscadora pide ayuda a Osiel Cárdenas, presunto narcotraficante
Semar conmemora el 25N con exposición sobre derechos de las mujeres; destacan medidas para prevenir la violencia de género
Gobierno prepara reforma para erradicar corrupción en casinos; fortalecerá recaudación fiscal, afirma Monreal
“México tiene gran cariño por el pueblo uruguayo”; Claudia Sheinbaum sostiene llamada con Yamandú Orsi tras victoria presidencial
VIDEO: Tras caso Marilyn Cote, Alejandro Armenta anuncia Clínica de Salud Mental en Puebla; hay que evitar estos casos
Pareciera que el mercado mexicano está saturado de vehículos automotores. Sí, a donde quiera que uno vea está lleno de autos, camiones y poco a poco hay más motocicletas. Y es
curioso pero hace unos 15 años se comenzó a gestar el boom de la industria automotriz; llegando más marcas que solo las tres de cajón, nuevos modelos, segmentos, versiones, equipamientos, etc.
Y justo eso está pasando con las motocicletas. Las marcas que ya están aquí se han dado a la tarea de traer nuevos modelos y versiones con tal de abrir su abanico de productos y ganar más mercado. Otras deciden llegar ya no con importadores sino como corporativos; se venden motos eléctricas y ya no pasa tanto tiempo en que aparezcan aquí los modelos que se lanzan en otras partes del mundo.
Un ejemplo claro es el segmento de 300 a 500cc, inexistente para unos y todo un reto para otros cuya visión es clara: ser los pioneros (al menos aquí en México, aunque no debemos olvidar a la KTM 390 Duke). Eso pasa con BMW Motorrad y Yamaha, que han decidido traer al mismo tiempo dos rivales de las cuales se habla desde el primer rumor de su salida: la BMW G 310 R, nacida en la India dentro de las entrañas de TVS pero con esencia alemana y menor a 650 cc. Porta un motor monocilíndrico de 313 cc y 34 hp, transmisión de seis velocidades y 159 kg.
Por otro lado, la Yamaha MT-03, japonesa basada en la deportiva YZF-R3, y bajo la estrategia de motores Masters of Torque, con un bicilíndrico de 321 cc y 42 hp. La transmisión también es de seis marchas y pesa 165 kg.
Ambas motocicletas son muy similares pero es en los detalles donde saltan las diferencias. Por ejemplo, algo muy importante es la seguridad y la BMW trae de serie frenos ABS, mientas que la Yamaha , no.
En el manejo, la indo-alemana tiene la suspensión delantera con una horquilla invertida que mejora el manejo y emite sensaciones más puristas, mientras que la asiática la tiene telescópica. Por otro lado, la MT-03 se ve como una motocicleta más moderna en cuanto a diseño y colores se refiere; la G 310 R tiene una apariencia mucho más común a lo que ya hay y no se parece en nada a ninguna de sus hermanas.
La Yamaha, por su parte, ya está a la venta y la BMW llegará, dicen las malas lenguas, hasta principios de 2017 por algunos “temas en la producción”.
Cabe destacar que este primer encuentro con ambas motocicletas fue estático; Yamaha ya está preparando la prueba dinámica en donde sin duda estaremos presentes y reportaremos nuestras sensaciones de manejo. Sin embargo, tenerlas lado a lado fue un buen referente para darnos una idea de lo que tiene cada una de ellas.
Es muy cierto que la BMW G 310 R ha aparecido en todos lados desde el año pasado que se anunció su aparición en la escena, además de que el peso de la marca alemana es muy importante. A esto, hay que sumar el precio de $84,300 con frenos ABS, mientras que la Yamaha MT-03 cuesta 600 pesos más ($84,900) y sin frenos ABS.
Al final, la decisión es del comprador y afortunadamente está más informado gracias a toda la información que se genera a nivel mundial. No dudamos que por el hecho de ser BMW, la gente vaya a comprar la G 310 R para decir: “tengo una BMW”, ya que en México eso importa mucho. Aunque por desarrollo, tecnología y manejo, la Yamaha MT-03 se siente superior. Ya veremos qué sucede cuando las probemos.