La marca alemana refresca el rostro y la figura de su nuevo maxi-scooter C 650 Sport 2016 y la lanza con un diseño completamente nuevo en el que destaca un aspecto agresivo, pero además la equipa con tecnología y gadgets de última generación que la consolidan entre los ejemplares de doble personalidad que brindan mayor seguridad en el mercado.
BMW ataca fuerte en el segmento con esta motocicleta creada principalmente para disfrutar el tráfico urbano pero también presume cualidades suficientes para convencer a los que gustan de la conducción deportiva en carreteras sinuosas, incluso en viajes son largos.
La nueva C 650 de la marca premium luce un diseño con carenado a dos tonos –naranja valencia metalizado y plata- que le proporciona un desempeño aerodinámico que realmente se disfruta y una estética que la distingue del resto de sus contendientes.
Su panel de instrumentos tipo análogo-digital, integra un velocímetro de gran tamaño y display LCD a través del cual envía información del estado de la motocicleta en tiempo real como el promedio de consumos, temperatura del aceite y ambiente, configuraciones en los sistemas periféricos, odómetro y tacómetro, éste último, con un gráfico un poco difícil de leer.
Las bondades a bordo, parten de su cómoda postura de manejo, puños y asientos calefactables, y debajo del asiento un amplio espacio para guardar nuestras pertenencias que se enriquece con el novedoso flexcase, capaz de modificar su geometría para guardar un casco tipo urbano.
Mejor desempeño. Mecánicamente cuenta con un motor bicilíndrico de 647 cc con 60 caballos de fuerza acoplado a una transmisión tipo CVT, estrena sistema de embrague y esquema de cambios. El resultado se percibe de manera inmediata con una contundente aceleración desde bajas revoluciones que permite hacer rebases y maniobras de salida en curvas.
Este es uno de los puntos que más llama la atención, sobre todo porque la generación anterior se caracterizaba por un desempeño más suave que en momentos llegaba a ser desesperante.
En la parte ciclo, la nueva C 650 S cuenta con horquilla invertida al frente y un basculante de aluminio en el eje trasero que es soportado por un monoshock de 115 milímetros en disposición horizontal. Si bien su manejo en pista es destacado y se disfruta la adrenalina que transmite, para ciudad requiere ligeros ajustes, sobre todo para enfrentar tramos accidentados.
El esquema de frenos se conforma por un doble disco en el eje frontal y disco sencillo en el trasero, las pinzas son firmadas por Nissin y cuentan con sistema antibloqueos ABS.
Los neumáticos Metzeler, nos dieron una sorpresa negativa porque no tienen suficiente agarre, tanto en piso seco como mojado, aunque en carretera y a temperaturas más elevadas, esto cambia radicalmente. El sistema de escape mejora su diseño ahora con doble salida para otorgarle un sonido más ronco y mejor desempeño.
En resumen. BMW C 650 Sport es ideal para rodar en nuestra urbe, pero también suficientemente cómoda para trayectos carreteros; es una de las mejores alternativas y digno contendiente de la Yamaha T-Max IRON MAX y de la Suzuki Burgman con un precio de entrada de 165 mil 700 pesos.
Sus argumentos más relevantes van de la mano del apartado de seguridad con control de tracción, iluminación automática diurna, parabrisas ajustable y gadgets de confort como las guanteras al frente con una toma de corriente de 12 Volts